El niño de la
Cabra
El niño apacible de
la cabra será un tesoro para sus padres. Él
amará el ser cuidado,, acariciado y muy
consentido. Es un artista y un amante sensible
de la belleza, él apreciará la música, la poesía, el
jabón perfumado para su baño y todas las
clases de aromas delicados que estimulen sus
sentidos. Ultra dependiente, él no querrá
hacer cualquier cosa por si mismo para ver si
alguien puede ayudarle. Caliente, suave,
vulnerable y sumiso, a él le gusta de ser
abastecida.
Le encanta aferrarse a su vieja manta de lana,
o en el caso
de una niña, su muñeca gastada de trapo. Él
odia las bromas hacia su persona y si es
criticado fuertemente o desconcertado en
la escuela, deseará no volver por muchos
días. Él buscará a jóvenes más dominantes para
tomarlo debajo de sus alas. Cuando él se
sienta rebajado, necesitará mucho empuje
y voluntad para salir a flote. Su gran
imaginación y constantes miedos,
pueden realmente enfermarlo. Él puede ser
influenciado fácilmente o ser afectado al
contrario, debido a su temperamento
melancólico.
Cuando es
ridiculizado o rechazado, él puede retirarse
en un mundo mágico y será difícil
llevarlo hacia fuera. El alimento y la
comodidad representan amor y seguridad para él.
Las cabras no tendrán ninguna prisa para salir
del hogar, si se los amó y cuidó bien.
Cuando él decide economizar, lo hará con gran
gusto. Ama lucir sus ropas y posee el don
de arreglar cosas. Voluble, contrario y
trivial ocasionalmente, él lo compensa siendo
extremadamente creativo, modesto y paciente.
Es muy compasivo sobre los dolores de otros;
cuando él está encariñado con alguien, su amor
y generosidad no tiene límites.
Recompensará a quien cuida de él pues lo
compensará con su afecto. Será imposible
cruzarse con él y pasar de largo. Puede
tener sus defectos, pero él sigue siendo una
joya de la calidad más refinada.
No esté asustado de
conducirlo con su mano o ayudándole a tomar las
decisiones. Buscará el consejo de sus padres y
la bendición de ellos.
No intente limpiar el
polvo de hadas de sus ojos . Será inútil, pues
las cabras verán siempre vida y el mundo a
través de cristales coloreados.
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