El propósito de esta carta fue el de ayudar a los cristianos a que hicieran seguro su llamamiento y selección, y evitaran que los descarriasen falsos maestros y hombres impíos de dentro de la misma congregación. (2Pe 1:10, 11; 2Pe 3:14-18.) En ella se anima a los cristianos a tener fe, virtud, conocimiento, autodominio, aguante, devoción piadosa, cariño fraternal y amor (2Pe 1:5-11), y se les exhorta a prestar atención a la “palabra profética” inspirada. (2Pe 1:16-21.)
Se citan ejemplos de ejecuciones de juicios de Jehová en el pasado contra personas impías, para mostrar que los que abandonan la senda de la justicia no escaparán de la ira de Dios. (2Pe 2:1-22.) Pese a lo que dijeran los burlones en los “últimos días”, el venidero día de Jehová —día de ejecución de los hombres impíos— es tan seguro como lo que le aconteció al mundo del día de Noé. Además, la promesa de Dios sobre unos nuevos cielos y una nueva tierra es segura y debería inducir a hacer esfuerzos diligentes para ser hallados sin tacha desde el punto de vista de Dios. (2Pe 3:1-18.)
Esta palabra proviene de la palabra griega que nos habla de escena y drama. Viene de un sustantivo (kjo·re·gós) que significa literalmente “el jefe de un coro”. El director de una obra teatral de aquel entonces no solamente dirigía el reparto. Junto con el estado, él también pagaba los gastos en que incurrían de adiestramiento y mantenimiento los miembros para poder brindar una presentación escénica. En otras palabras, el director del coro añadía su propia contribución monetaria a la suma aportada por el estado. Este verbo añadir significa entonces que el creyente contribuye pródigamente a su salvación.
Aquellos hombres asumían esa responsabilidad voluntariamente por amor a su ciudad, y pagaban los gastos con su propio dinero. Se enorgullecían de gastar grandes sumas de dinero con el fin de suministrar todo lo necesario para una representación magnífica. La palabra llegó a significar “suministrar, proporcionar con abundancia”. (Comp. con 2Pe 1:11.) Así que Pedro nos insta a suministrarnos a nosotros mismos, no solo alguna medida de devoción piadosa, sino la mayor expresión posible de esta preciada cualidad. (w90 1/3 12 párr. 9)
Cualidad de lo que es estable o no se mueve. 2. Voluntad inquebrantable y constancia en la realización de algo.
★Firmemente establecidos: Pedro utiliza la palabra griega ste·rí·zo, que aquí se traduce “están firmemente establecidos” y en la admonición que Jesús dio a Pedro con anterioridad se vierte “fortalece”: “Fortalece a tus hermanos”. (Lucas 22:32.) (w97 1/9 11 párr. 18)
Lit.: “pensé bien”. El verbo griego eu·do·ké·o significa “hallarse complacido, considerar favorablemente, deleitarse en”, y su forma sustantivada tiene el sentido de “buena voluntad, beneplácito, favor, deseo”. Eu·do·ké·o no se limita a la aprobación divina. Por ejemplo, los cristianos de Macedonia ‘tuvieron gusto’ en compartir sus bienes con otros. (Romanos 10:1; 15:26; 2 Corintios 5:8; 1 Tesalonicenses 2:8; 3:1.) Con todo, la aprobación que Jesús recibió la expresó Dios, no el hombre. Con referencia a Jesús, este término se usa solamente después de su bautismo. (Mateo 17:5; 2 Pedro 1:17.) (w88 15/11 10 párr. 4)
Aplicación voluntaria de la actividad mental o de los sentidos a un determinado estímulo u objeto mental o sensible. Acto que muestra que se está atento al bienestar o seguridad de una persona o muestra respeto, cortesía o afecto hacia alguien.
★“Cómo cuidará de la congregación”: (1 Timoteo 3:5) Al hablar de su deber de ‘cuidar dela congregación de Dios,’ el apóstol Pablo utiliza la palabra griega epimeléomai, que significa “cuidar de,” lo cual envuelve presciencia y provisión; epi indica ‘la dirección de la mente hacia el objeto que recibe cuidado.’ En Lucas 10:34, 35 esa palabra se usa respecto al cuidado que el buen samaritano otorgó al hombre herido. (w78 15/3 23)
★“Mira con cuidado”: (Santiago 1:25) El verbo griego que aquí se traduce “mira con cuidado” significa literalmente “habiéndose inclinado al lado de” o “inclinarse para mirar”, e implica esfuerzo y concentración. En efecto, para que la ley de la libertad influya en nuestra mente y corazón, tenemos que poner de nuestra parte estudiando atentamente la Biblia y reflexionando con oración en lo que leemos (1 Tim. 4:15).
★“Mirando atentamente”: (Hebreos 12:2) La palabra original traducida por “mirar atentamente”, según se usa en las Escrituras Griegas Cristianas, quiere decir “mirar algo sin distracción”, “apartar la mirada de algo a fin de poder ver otra cosa”, “fijar la mirada”. Dice cierta obra de consulta: “En el mismo instante en que el corredor aparta la mirada de la pista y la meta final y la vuelve hacia los espectadores, disminuye la velocidad. Así pasa con el cristiano”. Las distracciones pueden frenar nuestro progreso espiritual; por eso tenemos que mirar atentamente a Jesucristo. (w05 15/9 21 párr. 2) no seguimos a humanos imperfectos, pues mantenemos la vista fija en Cristo. Como dijo el traductor bíblico Edgar J. Goodspeed: “Los héroes de antaño no son los modelos del creyente, pues este tiene un mejor dechado en Cristo [...] El corredor cristiano tiene que fijar la vista en Jesús”. (w89 15/12 21 párr. 6)
Conceder a una cosa o persona menor valor o importancia del que merecen. 2. Considerar que algo o alguien no merece ningún aprecio o atención. El desprecio es el lado opuesto de la empatía. Mientras la empatía es la capacidad de abrirnos al otro y conectar con su realidad y necesidades, el desprecio hace lo contrario. Primero levanta un muro y después se alza sobre él en actitud de poder para denigrar y empequeñecer al otro.
La pesada competencia humana
Ya desde Caín y Abel surgieron diferencias y competencias entre los humanos, muchas veces debido a la envidia, no obstante, los implicados, por regla general estaban al tanto del espíritu que cada uno manifestaba, por ejemplo: Saúl envidiaba a David y lo perseguía a muerte, poniendo a la nación de Israel en contra de David, eso le causó mucha angustia a David quien se vió obligado a huir como un traidor fugitivo por unos 20 a 22 años, mientras que Saúl disfrutaba de una encumbrada posición como rey de Israel. No obstante en su interior Saúl estaba al tanto de su envidia y mal espíritu y de que Jehová no lo aprobaba, sabía que el buen siervo de Jehová era David, él lo sabía, David lo sabía y lo más importante, Jehová lo sabía. (Ec 8:14;1Sa 24:19, 20) Los hermanos de José, notaron que José era especial, lo que los llevo a desarrollar envidia contra el al punto de odiarlo y venderlo por no matarlo, de modo que José llego a ser esclavo en el extranjero, como persona de segunda clase, en esa condición fue acusado falsamente por la esposa de Potifar, de modo que callo más bajo aún, siendo encarcelado como un delincuente despreciable, en total sufrió por más de 13 años en esas condiciones.
Mientras tanto sus hermanos disfrutaban de una buena posición delante de su padre Jacob y mantenían su aparente honor.
Estas confusas apariencias surgieron muy a menudo con personajes bíblicos importantes como Job con sus “falsos amigos” (Job 16:2-4), Pablo con los apóstoles “superfinos” (2Cor. 11:2-6) y Jesús con los “escribas y fariseos” (Mateo 12:22-24), así que si estas pasando por una fase de tu vida donde las apariencias están desfavorables para ti, asegurate que las razones sean favorables para poder recibir a su debido tiempo la evidente aprobación y bendición de Jehová. (1Co 4:10; 1Pe 5:6; Snt 5:11.)
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★“Teniendo muy presente”: (2 Pedro 3:12) O: “deseando ardientemente”. Lit.: “acelerando”. La palabra griega que se traduce “teniendo muy presente” significa literalmente “acelerando”. .... Según cierta obra de consulta, la raíz verbal de la expresión “acelerando” equivale aquí a “‘apresurar’, de modo que está muy relacionada con ‘ser celoso y activo, estar interesado por algo’”. Por tanto, Pedro estaba exhortando a sus hermanos en la fe a vivir “deseando ardientemente” la presencia del día de Jehová, algo que lograrían si la tenían presente en todo momento. (w03 15/7 10 párr. 4)
La expresión “teniendo muy presente”, que Pedro utiliza con referencia al día de Jehová, significa que no lo posponemos mentalmente. (w97 1/9 19 párr. 2) Según The Kingdom Interlinear Translation of the Greek Scriptures, esa expresión “teniendo muy presente” es “apresurando.” (w74 369 párr. 13)
Mientras aguardamos, el tiempo nos pasará mucho más deprisa si estamos ocupados en el servicio a Dios. Meditar en la Palabra de Dios y en los recordatorios que contiene también nos permitirá vivir con “la anhelante expectativa del día aquel, preparados para su llegada. En efecto, estaremos “deseando ardientemente” que venga (2Pe 3:12, La Biblia al Día [edición para España]; Versión Moderna, 1910, nota) (w06 15/12 19 párr. 18, 19)
Es cierto, no podemos alterar el horario de Jehová. Su día vendrá a la hora que él ha fijado, pero el lapso de tiempo desde ahora hasta que llegue ese momento pasará mucho más rápido si estamos ocupados en su servicio (1Co 15:58). (w03 1/1 11 párr. 11)
“Cristo nos libertó. Por lo tanto estén firmes, y no se dejen restringir otra vez en un yugo de esclavitud.” (Gálatas 5:1) “Todas las cosas me son lícitas.” (1 Corintios 6:12) “Todas las cosas les son limpias a los limpios.” (Tito 1:15)
Sin embargo, pasaban por alto el hecho de que Pablo también dijo:
“No usen esta libertad como incentivo para la carne; antes bien, mediante el amor, sírvanse como esclavos unos a otros. Porque toda la Ley queda cumplida en un dicho, a saber: ‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo.’” (Gálatas 5:13, 14) “Que cada uno siga buscando, no su propia ventaja, sino la de la otra persona.”—1 Corintios 10:24.