Con el tiempo, Jehová entregó en sus manos al rey Jehoiaquim de Judá,c así como algunos de los utensiliosd de la casa del Dios verdadero, y él los llevó a la tierra de Sinar,e a la casa de su dios. Y puso los utensilios en el tesoro de su dios.f
Entonces el rey le ordenó a Aspenaz, el jefe de los funcionarios de su corte, que trajera a algunos israelitas, incluidos algunos descendientes de la realeza y la nobleza.
Debían ser jóvenes sin ningún defecto físicoi y de buena apariencia, que tuvieran sabiduría,j conocimiento y discernimiento y que pudieran servirk en el palacio del rey.l Él tendría que enseñarles la escritura y el idioma de los caldeos.
Además, el rey ordenó que se les diera una ración diaria de los manjaresm del rey y del vino que él bebía. Tenían que educarlos durante tres años, y al final de ese periodo pasarían a servir al rey.
Y el funcionario principal de la corte les puso otros nombres: a Daniel, lo llamó Beltsasar; a Hananías, Sadrac; a Misael, Mesac y, a Azarías, Abednego.
Pero Daniel decidió en su corazón que no iba a contaminarsec con los manjares del rey ni con el vino que él bebía. Así que le pidió permiso al funcionario principal de la corte para no consumir esas cosas que lo contaminarían.d
Pero el funcionario principal de la corte le dijo a Daniel: “Tengo miedo de mi señor el rey, quien determinó lo que debíanf comer y beber. ¿Y si ve que ustedes tienen peor aspecto que los otros jóvenes de su edad? Ustedes harían que yo fuera culpable ante el rey”.
Entonces Daniel le dijo al guardián a quien el funcionario principal de la corte había nombrado para que cuidara de Daniel, Hananías, Misael y Azarías:
Luego compara nuestro aspecto con el de los jóvenes que comen de los manjares del rey. Entonces, según lo que veas, decide qué quieres hacer con tus siervos”.
Y el Dios verdadero les dio a estos cuatro jóvenes conocimiento y comprensión de todo tipo de escritura y sabiduría,a y Daniel recibió la capacidad de entender todo tipo de visiones y sueños.b
Cuando el rey habló con ellos, se vio que no había nadie en todo el grupo como Daniel, Hananías, Misael y Azarías, y ellos se quedaron a servir al rey.
Cada vez que el rey les preguntaba por cualquier asunto en el que se necesitara sabiduría y entendimiento, él veía que eran 10 veces mejores que todos los sacerdotes-magos y los adivinos que había en todo su reino.
Así que el rey mandó llamar a los sacerdotes-magos, los adivinos, los hechiceros y los caldeos para que le dijeran lo que había soñado. Entonces, ellos entraron y se presentaron ante el rey.
El rey les contestó a los caldeos: “Esta es mi decisión final: si no me revelan el sueño y su interpretación, haré que ustedes sean desmembrados y que sus casas se conviertan en letrinas públicas;
en cambio, si me revelan el sueño y su interpretación, les daré regalos, recompensas y grandes honores. Así pues, díganme el sueño y su interpretación”.
Si no me revelan el sueño, hay un único castigo para todos ustedes. Pero ustedes se han puesto de acuerdo para contarme una mentira y engañarme esperando a que cambie la situ8ción. De modo que revélenme el sueño y así sabré que pueden darme su interpretación”.
Los caldeos le contestaron al rey: “No hay ningún hombre en toda la tierra capaz de hacer lo que pide el rey. De hecho, ningún gran rey ni gobernador le ha pedido algo así a ningún sacerdote-mago ni adivino ni caldeo.
Entonces Daniel se dirigió con discreción y prudencia a Arioc, que era el jefe de la guardia personal del rey y había salido a matar a los sabios de Babilonia.
Les pidió que le suplicaran misericordia al Dios del cielo en cuanto a ese secreto, para que ni Daniel ni sus compañeros fueran exterminados con los demás sabios de Babilonia.
A ti te doy gracias y te alabo, oh, Dios de mis antepasados, porque me has dado sabiduría y poder. Y ahora me has revelado lo que te hemos pedido; nos has revelado lo que le preocupa al rey”.
Entonces Daniel fue adonde estaba Arioc, a quien el rey le había encargado que matara a los sabios de Babilonia, y le dijo: “No mates a ninguno de los sabios de Babilonia. Llévame ante el rey y yo le revelaré la interpretación”.
Rápidamente, Arioc llevó a Daniel ante el rey y le dijo: “He encontrado a un hombre entre los desterrados de Judá que puede revelarle la interpretación al rey”.
Pero hay un Dios en los cielos que revela los secretos, y él le ha anunciado al rey Nabucodonosor lo que va a suceder en la parte final de los días. Estos son tu sueño y las visiones que tuviste en tu cabeza cuando estabas acostado en tu cama:
”Oh, rey, cuando estabas acostado en tu cama, te pusiste a pensar en lo que sucedería en el futuro, y el que revela los secretos te ha anunciado lo que va a pasar.
Este secreto no se me ha revelado a mí porque tenga más sabiduría que cualquier otra persona. Más bien, se me reveló para que el rey supiera la interpretación y así tú conocieras los pensamientos de tu corazón.
”Tú, oh, rey, estabas mirando y entonces viste una estatua enorme. Esa estatua, que era inmensa y extremadamente brillante, estaba de pie enfrente de ti y tenía un aspecto aterrador.
Entonces el hierro, el barro, el cobre, la plata y el oro fueron hechos añicos todos juntos y pasaron a ser como la paja de la era en el verano, y el viento se los llevó para que no quedara ni rastro de ellos. Pero la piedra que golpeó la estatua se convirtió en una gran montaña y llenó toda la tierra.
en cuyas manos entregó hombres dondequiera que vivieran, así como los animales del campo y las aves de los cielos, y a quien hizo gobernante de todos ellos—, tú mismo eres la cabeza de oro.
”El cuarto reino será fuerte como el hierro. Porque, tal como el hierro hace añicos y pulveriza todo lo demás, sí, igual que el hierro que destroza, este hará añicos y destrozará a todos estos reinos.
”Y, tal como los pies y los dedos de los pies que viste eran en parte de barro de alfarero y en parte de hierro, el reino estará dividido, pero tendrá algo de la dureza del hierro, igual que el hierro mezclado con barro húmedo que viste.
Igual que el hierro mezclado con barro húmedo que viste, ellos se mezclarán con el pueblo. Pero no se mantendrán unidos unos a otros, tal como el hierro no se mezcla con el barro.
”En los días de esos reyes,a el Dios del cielob establecerá un reinoc que nunca será destruidod ni pasará a manos de ningún otro pueblo.e Este reino hará añicos y pondrá fin a todos esos reinos,f y será el único que permanecerá para siempre,g
tal como viste que pasaba cuando se cortó una piedra de la montaña, aunque no con manos humanas,h y la piedra hizo añicos el hierro, el cobre, el barro, la plata y el oro.i El Gran Diosj le ha revelado al rey lo que sucederá en el futuro.k El sueño es verdadero y su interpretación es digna de confianza”.l
El rey le dijo a Daniel: “El Dios de ustedes es verdaderamente Dios de dioses, Señor de reyes y el que revela secretos, porque pudiste revelar este secreto”.
Luego, el rey engrandeció a Daniel, le hizo muchos regalos magníficos y lo nombró gobernante de toda la provincia de Babilonia y prefecto principal de todos los sabios de Babilonia.
A petición de Daniel, el rey puso a Sadrac, Mesac y Abednego a cargo de la administración de la provincia de Babilonia, pero Daniel se quedó en la corte del rey.
Entonces el rey Nabucodonosor mandó reunir a los sátrapas, los prefectos, los gobernadores, los consejeros, los tesoreros, los jueces, los magistrados y a todos los administradores de las provincias para la inauguración de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado.
De modo que los sátrapas, los prefectos, los gobernadores, los consejeros, los tesoreros, los jueces, los magistrados y todos los administradores de las provincias se reunieron para la inauguración de la estatua que el rey Nabucodonosor había levantado. Y se quedaron de pie enfrente de la estatua que Nabucodonosor había levantado.
que, cuando oigan el cuerno, la flauta, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerda, la gaita y los demás instrumentos musicales, tienen que caer de rodillas y adorar la estatua de oro que el rey Nabucodonosor ha levantado.
Así que, cuando se oyó el cuerno, la flauta, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerda y los demás instrumentos musicales, gente de todo pueblo, nación e idioma cayó de rodillas y adoró la estatua de oro que el rey Nabucodonosor había levantado.
Oh, rey, tú ordenaste que todo hombre que oyera el cuerno, la flauta, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerda, la gaita y los demás instrumentos musicales debía caer de rodillas y adorar la estatua de oro
Pues hay unos judíos a los que tú nombraste para administrar la provincia de Babilonia que no te han mostrado respeto, oh, rey. Son Sadrac, Mesac y Abednego. Ellos no sirven a tus dioses y no quieren adorar la estatua de oro que tú has levantado”.
Si ahora, cuando oigan el cuerno, la flauta, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerda, la gaita y los demás instrumentos musicales, están dispuestos a caer de rodillas y adorar la estatua que he hecho, está bien. Pero, si se niegan a adorarla, serán arrojados de inmediato en el horno de fuego. ¿Y qué dios podrá librarlos de mis manos?”.
Entonces Nabucodonosor se puso tan furioso con Sadrac, Mesac y Abednego que la expresión de su cara cambió. Así que dio la orden de calentar el horno siete veces más de lo normal.
Como la orden del rey había sido tan severa y el horno estaba mucho más caliente de lo normal, los hombres que llevaron a Sadrac, Mesac y Abednego murieron por las llamas del fuego.
Entonces el rey Nabucodonosor, asustado, se levantó rápidamente y les preguntó a sus altos funcionarios: “¿No atamos y arrojamos en el fuego a tres hombres?”. Ellos le respondieron al rey: “Sí, oh, rey”.
Nabucodonosor se acercó a la puerta del horno de fuego y dijo: “¡Sadrac, Mesac, Abednego! ¡Siervos del Dios Altísimo! ¡Salgan y vengan acá!”. Así que Sadrac, Mesac y Abednego salieron de en medio del fuego.
Y los sátrapas, los prefectos, los gobernadores y los altos funcionarios del rey que estaban allí reunidos vieron que el fuego no les había hecho daño a los cuerpos de esos hombres. No se les había chamuscado ni un solo pelo de la cabeza, sus mantos estaban igual que antes y ni siquiera olían a humo.
Entonces Nabucodonosor dijo: “Alabado sea el Dios de Sadrac, Mesac y Abednego,e que envió a su ángelf y rescató a sus siervos. Ellos confiaron en él,g no obedecieron la orden del rey y estuvieron dispuestos a morir antes que servirh y adorari a otro dios que no fuera su propio Dios.j
Por eso, doy esta orden: que cualquier persona —sin importar su pueblo, nación o idioma— que diga algo contra el Dios de Sadrac, Mesac y Abednego sea desmembrada y que su casa se convierta en una letrina pública, pues no existe otro dios que pueda librar como este”.
¡Cuán grandes son sus señales, y cuán poderosas son sus maravillas! Su reino es un reino hasta tiempo indefinido, y su gobernación es para generación tras generación.
”En aquel tiempo los sacerdotes practicantes de magia, los sortílegos, los caldeos y los astrólogos entraban; y yo decía delante de ellos lo que era el sueño, pero su interpretación no me la hacían saber.
Y al fin llegó a estar delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar conforme al nombre de mi dios, y en quien hay el espíritu de los dioses santos; y delante de él dije lo que era el sueño:
”‘Oh Beltsasar, el jefe de los sacerdotes practicantes de magia, porque yo mismo bien sé que el espíritu de los santos dioses está en ti y que no hay secreto alguno que te perturbe, infórma[me] las visiones de mi sueño que he contemplado, y su interpretación.
”’Ahora bien, sucedió que las visiones de mi cabeza sobre mi cama contemplaba, y, ¡mira!, un árbol en medio de la tierra, y la altura de este era inmensa.
Su follaje era hermoso, y su fruto era abundante, y había alimento para todos en él. Bajo él las bestias del campo buscaban sombra, y en sus ramas mayores los pájaros de los cielos moraban, y de él toda carne se alimentaba.
Clamaba con fuerza, y esto es lo que decía: “Corten el árbol, y desmochen sus ramas mayores. Sacudan su follaje, y esparzan su fruto. Que la bestia huya de debajo de él, y los pájaros de sus ramas mayores.
No obstante, dejen su tronco mismo con las raíces en la tierra, aun con una atadura de hierro y de cobre, entre la hierba del campo; y con el rocío de los cielos sea mojado, y con la bestia sea su porción entre la vegetación de la tierra.
Por el decreto de vigilantes es la cosa, y [por] el dicho de santos la solicitud es, con la intención de que sepan los vivientes que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere [darlo] lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad”.
”’Este fue el sueño que yo mismo, el rey Nabucodonosor, contemplé; y tú mismo, oh Beltsasar, di lo que es la interpretación, puesto que ninguno de todos los [otros] sabios de mi reino puede hacerme saber la interpretación misma. Pero tú eres competente, porque el espíritu de dioses santos está en ti’.
”En aquel tiempo Daniel mismo, cuyo nombre es Beltsasar, quedó pasmado por un momento, y sus pensamientos mismos empezaron a asustarlo. ”El rey respondía y decía: ‘Oh Beltsasar, no dejes que el sueño y su interpretación mismos te asusten’. ”Beltsasar respondía y decía: ‘Oh mi señor, [aplique] el sueño a los que te odian, y su interpretación a tus adversarios.
”’El árbol que contemplaste, que se hizo grande y llegó a ser fuerte, y la altura del cual finalmente alcanzó a los cielos, y que le era visible a toda la tierra,
y el follaje del cual era hermoso, y el fruto del cual era abundante, y en el cual había alimento para todos; debajo del cual las bestias del campo moraban, y en las ramas mayores del cual los pájaros de los cielos residían,
eres tú, oh rey, porque te has hecho grande y has llegado a ser fuerte, y tu grandeza se ha hecho grande y ha alcanzado a los cielos, y tu gobernación hasta la extremidad de la tierra.
”’Y porque el rey contempló a un vigilante, hasta a un santo, que venía bajando de los cielos, que también decía: “Corten el árbol, y arruínenlo. No obstante, dejen su tronco mismo con las raíces en la tierra, pero con una atadura de hierro y de cobre, entre la hierba del campo, y con el rocío de los cielos sea mojado, y con las bestias del campo sea su porción hasta que siete tiempos mismos pasen sobre él”,
Y te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo tu morada llegará a ser, y la vegetación es lo que te darán aun a ti a comer tal como a toros; y con el rocío de los cielos tú mismo estarás mojándote, y siete tiempos mismos pasarán sobre ti, hasta que sepas que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere [darlo] lo da.
Por lo tanto, oh rey, que te parezca bueno mi consejo, y remueve tus propios pecados por justicia, y tu iniquidad por medio de mostrar misericordia a los pobres. Quizás ocurra un alargamiento de tu prosperidad’.”
El rey respondía y decía: “¿No es esta Babilonia la Grande, la cual yo mismo he construido para la casa real con la fortaleza de mi poder y para la dignidad de mi majestad?”.
Mientras la palabra todavía estaba en la boca del rey, hubo una voz que cayó de los cielos: “A ti se te dice, oh Nabucodonosor el rey: ‘El reino mismo se ha ido de ti,
y de la humanidad te echan, sí, y con las bestias del campo tu morada será. Vegetación te darán aun a ti para comer tal como a toros, y siete tiempos mismos pasarán sobre ti, hasta que sepas que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere [darlo] lo da’”.
En aquel momento la palabra misma se cumplió en Nabucodonosor, y de entre la humanidad fue echado, y empezó a comer vegetación tal como los toros, y con el rocío de los cielos su propio cuerpo se mojaba, hasta que su cabello mismo le creció largo como [plumas] de águilas, y sus uñas como [garras] de pájaros.
“Y al fin de los días yo, Nabucodonosor, alcé a los cielos los ojos, y mi propio entendimiento empezó a volverme; y bendije al Altísimo mismo, y a Aquel que vive hasta tiempo indefinido alabé y glorifiqué, porque su gobernación es una gobernación hasta tiempo indefinido, y su reino es para generación tras generación.
Y a todos los habitantes de la tierra se está considerando como meramente nada, y él está haciendo conforme a su propia voluntad entre el ejército de los cielos y los habitantes de la tierra. Y no existe nadie que pueda detener su mano o que pueda decirle: ‘¿Qué has estado haciendo?’.
”Al mismo tiempo mi entendimiento mismo empezó a volver a mí, y para la dignidad de mi reino mi majestad y mi resplandor mismos empezaron a volver a mí; y hasta mis altos oficiales reales y mis grandes me empezaron a buscar con empeño, y fui restablecido sobre mi propio reino, y grandeza extraordinaria me fue añadida.
”Ahora yo, Nabucodonosor, alabo y ensalzo y glorifico al Rey de los cielos, porque todas sus obras son verdad y sus caminos son justicia, y porque a los que andan con orgullo él los puede humillar.”
Belsasar, bajo la influencia del vino, dijo que trajeran los vasos de oro y de plata que Nabucodonosor su padre se había llevado del templo que hubo en Jerusalén, para que bebieran de ellos el rey y sus grandes, sus concubinas y sus esposas secundarias.
En aquel tiempo trajeron los vasos de oro que se habían llevado del templo de la casa de Dios que hubo en Jerusalén, y bebieron de ellos el rey y sus grandes, sus concubinas y sus esposas secundarias.
En aquel momento los dedos de la mano de un hombre salieron, y escribían enfrente del candelabro sobre el enlucido de la pared del palacio del rey, y el rey contemplaba el dorso de la mano que escribía.
En aquel tiempo, en lo que respecta al rey, su expresión misma se cambió en él, y sus propios pensamientos empezaron a asustarlo, y las coyunturas de sus caderas estuvieron aflojándose, y sus rodillas mismas daban una contra otra.
El rey gritaba con fuerza que trajeran a los sortílegos, los caldeos y los astrólogos. El rey respondía y decía a los sabios de Babilonia: “A cualquier hombre que lea esta escritura y me muestre su interpretación misma, con púrpura será vestido, con un collar de oro alrededor de su cuello, y como el tercero en el reino gobernará”.
En aquel tiempo todos los sabios del rey entraban, pero no fueron lo suficientemente competentes como para leer la escritura misma ni hacer saber al rey la interpretación.
En lo que respecta a la reina, debido a las palabras del rey y sus grandes entró directamente en el salón de banquetes. La reina respondió y dijo: “Oh rey, sigue viviendo aun hasta tiempos indefinidos. No dejes que tus pensamientos te asusten, ni dejes que tu expresión cambie.
Existe en tu reino un hombre capacitado en el cual hay el espíritu de dioses santos; y en los días de tu padre se hallaron en él iluminación y perspicacia y sabiduría como la sabiduría de dioses, y el rey Nabucodonosor tu padre mismo lo colocó como jefe de los sacerdotes practicantes de magia, los sortílegos, los caldeos [y] los astrólogos, [aun] tu padre, oh rey;
puesto que un espíritu extraordinario y conocimiento y perspicacia para interpretar sueños y la explicación de enigmas y el desatar nudos se habían hallado en él, en Daniel, a quien el rey mismo dio el nombre de Beltsasar. Ahora que se llame a Daniel mismo, para que muestre la interpretación misma”.
De acuerdo con esto, trajeron a Daniel mismo delante del rey. El rey se expresaba y decía a Daniel: “¿Eres tú el Daniel que es de los desterrados de Judá, a quien el rey mi padre sacó de Judá?
Y ahora se ha traído delante de mí a los sabios [y] los sortílegos, para leer esta misma escritura, hasta para hacerme saber su interpretación, pero no son lo suficientemente competentes como para mostrar la interpretación misma de la palabra.
Y yo mismo he oído acerca de ti, que tú puedes suministrar interpretaciones y desatar los nudos mismos. Ahora, si puedes leer la escritura y hacerme saber su interpretación misma, con púrpura serás vestido, con un collar de oro alrededor del cuello, y como el tercero en el reino gobernarás”.
En aquel tiempo Daniel respondía y decía delante del rey: “Tus dádivas resulten para ti mismo, y tus regalos da a otros, sí. No obstante, leeré la escritura misma al rey, y la interpretación le haré saber.
Y debido a la grandeza que Él le dio, todos los pueblos, grupos nacionales y lenguajes resultaron estar temblando y mostrando temor delante de él. A quien quería, mataba; y a quien quería, hería; y a quien quería, ensalzaba; y a quien quería, humillaba.
Pero cuando su corazón se hizo altivo y su propio espíritu se hizo duro, de modo que actuó presuntuosamente, fue bajado del trono de su reino, y su propia dignidad le fue quitada.
Y de los hijos de la humanidad fue echado, y su corazón mismo fue hecho como el de una bestia, y con los asnos salvajes su morada fue. Vegetación le daban a comer tal como a toros, y con el rocío de los cielos su propio cuerpo llegó a ser mojado, hasta que supo que el Dios Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a aquel a quien quiere coloca sobre él.
Antes bien, contra el Señor de los cielos te ensalzaste,j y trajeron delante de ti hasta los vasos de su casa;k y tú mismo y tus grandes, tus concubinas y tus esposas secundarias han estado bebiendo vino de ellos, y tú has alabado a meros dioses de plata y de oro, cobre, hierro, madera y piedra,l que nada contemplan y nada oyen y nada saben;m pero al Dios en cuya mano tu aliento está,n y al cual pertenecen todos tus caminos,o no has glorificado.p
En aquel tiempo Belsasar mandó, y vistieron a Daniel con púrpura, con un collar de oro alrededor del cuello; y por heraldo anunciaron, acerca de él, que había de llegar a ser el tercer gobernante en el reino.
y sobre ellos a tres altos funcionarios, de los cuales Daniel fue uno, para que estos sátrapas continuamente les dieran el informe y el rey mismo no saliera perdiendo.
Entonces este Daniel fue distinguiéndose constantemente sobre los altos funcionarios y los sátrapas, puesto que un espíritu extraordinario estaba en él; y el rey tenía la intención de elevarlo sobre todo el reino.
En aquel tiempo los altos funcionarios y los sátrapas mismos constantemente procuraban hallar algún pretexto contra Daniel respecto al reino; pero no había pretexto ni cosa corrupta alguna que pudieran hallar, puesto que él era digno de confianza y no se hallaba en él ninguna negligencia ni cosa corrupta.
Por consiguiente, estos hombres físicamente capacitados decían: “No hallaremos en este Daniel ningún pretexto en absoluto, excepto si [lo] tenemos que hallar contra él en la ley de su Dios”.
Por lo tanto, estos altos funcionarios y sátrapas mismos entraron en tropel al rey, y esto es lo que le decían: “Oh Darío el rey, sigue viviendo aun para tiempos indefinidos.
Todos los altos funcionarios del reino, los prefectos y los sátrapas, los altos oficiales reales y los gobernadores, han entrado en consejo juntos para establecer un estatuto reale y dar vigor a un entredicho: que quienquiera que haga una petición a cualquier dios u hombre, por treinta días, excepto a ti, oh rey, sea arrojado en el foso de los leones.f
Ahora, oh rey, dígnate establecer el estatuto y firmar el escrito,g para que no se cambie, conforme a la ley de los medos y los persas,h que no se anula”.i
Pero Daniel, tan pronto como supo que el escrito había sido firmado, entró en su casa, y, las ventanas de su cámara del techo estando abiertas para él hacia Jerusalén,k hasta tres veces al díal se hincaba de rodillas y orabam y ofrecía alabanza delante de su Dios,n como había estado haciendo regularmente antes de esto.o
En aquel tiempo estos hombres físicamente capacitados mismos entraron atropelladamente y hallaron a Daniel haciendo petición e implorando favor delante de su Dios.p
Entonces fue cuando se acercaron y estuvieron diciendo delante del rey, acerca del entredicho del rey: “¿No hay un entredicho que has firmado en el sentido de que cualquier hombre que haga petición de cualquier dios u hombre por treinta días excepto de ti, oh rey, sea arrojado en el foso de los leones?”. El rey respondía y decía: “El asunto está bien establecido según la ley de los medos y los persas, que no se anula”.
Ellos inmediatamente respondieron, y decían ante el rey: “Daniel, quien es de los desterrados de Judá, no les ha prestado atención ni a ti, oh rey, ni al entredicho que firmaste, sino que tres veces al día hace su petición”.
Por consiguiente, al rey, en cuanto oyó la palabra, esta le fue muy desagradable, y fijó [la] mente hacia Daniel para rescatarlo; y hasta la puesta del sol siguió esforzándose por librarlo.
Finalmente estos hombres físicamente capacitados mismos entraron en tropel al rey, y estuvieron diciendo al rey: “Fíjate, oh rey, que la ley que pertenece a los medos y los persas es que cualquier entredicho o estatuto que el rey mismo establece no ha de ser cambiado”.
De acuerdo con esto, el rey mismo dio orden, y trajeron a Daniel y lo arrojaron en el foso de los leones. El rey respondía y decía a Daniel: “Tu Dios a quien sirves con constancia, él mismo te rescatará”.
Y fue traída una piedra, y fue colocada en la boca del foso, y el rey la selló con su anillo de sellar y con el anillo de sellar de sus grandes, para que nada se cambiara en el caso de Daniel.
Y al llegar cerca del foso, gritó con voz triste aun a Daniel. El rey se expresaba y decía a Daniel: “Oh Daniel, siervo del Dios vivo, ¿ha podido tu Dios a quien sirves con constancia rescatarte de los leones?”.
Mi propio Diosc envió a su ángeld y cerró la boca de los leones,e y no me han arruinado, puesto que delante de él se halló inocencia misma en mí;f y también delante de ti, oh rey, ningún acto nocivo he hecho”.g
Entonces fue cuando el rey mismo se alegró mucho, y ordenó que a Daniel mismo lo alzaran del foso. Y Daniel fue alzado del foso, y no se halló ningún daño en él, porque había confiado en su Dios.
Y el rey dio orden, y trajeron a aquellos hombres físicamente capacitados que habían acusado a Daniel, y en el foso de los leones los arrojaron, a ellos, sus hijos y sus esposas; y no habían llegado al fondo del foso antes que los leones hubieran logrado el dominio sobre ellos, y trituraron todos sus huesos.
Entonces fue cuando Darío el rey mismo escribió a todos los pueblos, los grupos nacionales y las lenguas que moran en toda la tierra: “¡Aumente muchísimo la paz de ustedes!
De delante de mí ha sido emitida una orden de que, en todo dominio de mi reino, la gente ha de temblar y temer delante del Dios de Daniel. Porque él es el Dios vivo y Aquel que dura hasta tiempos indefinidos, y su reino es uno que no será reducido a ruinas, y su dominio es para siempre.
En el primer año de Belsasar el rey de Babilonia, Daniel mismo contempló un sueño y visiones de su cabeza sobre su cama. En aquel tiempo puso por escrito el sueño mismo. La narración completa de los asuntos informó.
Daniel se expresaba y decía: “Sucedió que contemplaba en mis visiones durante la noche, y, ¡pues vea!, los cuatro vientos de los cielos estaban agitando el vasto mar.
”La primera era como un león, y tenía las alas de un águila. Seguí contemplando hasta que sus alas fueron arrancadas, y fue alzada de la tierra y se le hizo pararse sobre dos pies justamente como un hombre, y se le dio el corazón de un hombre.
”Y, ¡pues vea!, otra bestia, una segunda, y esta era como un oso. Y de un lado estaba levantada, y había tres costillas en su boca entre sus dientes; y esto era lo que le decían: ‘Levántate, come mucha carne’.
”Después de esto seguí contemplando, y, ¡pues vea!, otra [bestia], una como un leopardo, pero tenía cuatro alas de una criatura voladora en la espalda. Y la bestia tenía cuatro cabezas, y se le dio gobernación en realidad.
”Después de esto seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea!, una cuarta bestia, espantosa y terrible y extraordinariamente fuerte. Y tenía dientes de hierro, grandes. Estaba devorando y triturando, y lo que quedaba lo estaba pisoteando con sus pies. Y era una cosa diferente de todas las [otras] bestias que habían sido antes de ella, y tenía diez cuernos.
Seguí considerando los cuernos, y, ¡mire!, otro cuerno, uno pequeño, salió entre ellos, y hubo tres de los primeros cuernos que fueron arrancados de delante de él. Y, ¡mire!, había ojos como los ojos de un hombre en este cuerno, y había una boca que estaba hablando cosas grandiosas.
”Seguí contemplando hasta que se colocaron tronosc y el Anciano de Díasd se sentó. La ropa de él era blanca justamente como la nieve,e y el cabello de su cabeza era como lana limpia.f Su trono era llamas de fuego;g sus ruedas eran un fuego ardiente.h
Había una corriente de fuego que fluía y salía de delante de él.i Había mil millares que seguían ministrándole,j y diez mil veces diez mil que seguían de pie directamente delante de él.k El Tribunall tomó asiento, y hubo libros que se abrieron.
”Seguí contemplando en aquel tiempo debido al sonido de las palabras grandiosas que el cuerno estaba hablando;m seguí contemplando hasta que la bestia fue muerta y su cuerpo fue destruido y fue dado al fuego ardiente.n
”Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea!, con las nubesq de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre;r y al Anciano de Díass obtuvo acceso, y lo presentaron cerca, aun delante, de Aquel.a
Y a él fueron dados gobernaciónb y dignidadc y reino,d para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él.e Su gobernación es una gobernación de duración indefinida que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.f
Me acerqué a uno de aquellos que estaban de pie, para solicitar de él información confiable acerca de todo esto. Y él me dijo, al pasar a hacerme saber la interpretación misma de los asuntos:
Pero los santos del Supremo recibirán el reino, y ellos tomarán posesión del reino para tiempo indefinido, aun para tiempo indefinido sobre tiempos indefinidos’.
”Entonces fue cuando deseé asegurarme en cuanto a la cuarta bestia, que resultó diferente de todas las otras, extraordinariamente espantosa, los dientes de la cual eran de hierro y las garras de la cual eran de cobre, la cual devoraba [y] trituraba, y la cual pisoteaba con los pies hasta lo que quedaba;
y acerca de los diez cuernos que estaban en su cabeza, y el otro [cuerno] que subió y delante del cual cayeron tres, aun aquel cuerno que tenía ojos y una boca que hablaba cosas grandiosas y cuya apariencia era mayor que la de sus compañeros.
hasta que vino el Anciano de Días y juicio mismo se dio a favor de los santos del Supremo, y llegó el tiempo definitivo en que los santos tomaron posesión del reino mismo.
”Esto es lo que él dijo: ‘En cuanto a la cuarta bestia, hay un cuarto reino que llegará a existir en la tierra, que será diferente de todos los [demás] reinos; y devorará toda la tierra y la hollará y triturará.
Y en cuanto a los diez cuernos, de ese reino hay diez reyes que se levantarán; y hasta otro se levantará después de ellos, y él mismo será diferente de los primeros, y a tres reyes humillará.
Y hablará hasta palabras contra el Altísimo, y hostigará continuamente a los santos mismos del Supremo. Y tendrá intención de cambiar tiempos y ley, y ellos serán dados en su mano por un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo.
”’Y el reino y la gobernación y la grandeza de los reinos bajo todos los cielos fueron dados al pueblo que son los santos del Supremo. Su reino es un reino de duración indefinida, y todas las gobernaciones servirán y obedecerán aun a ellos’.
”Hasta este punto es el final del asunto. En cuanto a mí, Daniel, mis propios pensamientos siguieron asustándome muchísimo, de modo que mi expresión misma cambió en mí; pero el asunto mismo lo guardé en mi propio corazón”.
En el tercer año de la gobernación real de Belsasar el rey, hubo una visión que se me apareció, aun a mí, Daniel, después de la que se me apareció al comienzo.
Y empecé a ver en la visión; y aconteció, mientras estaba viendo, que estuve en Susa el castillo, que está en Elam el distrito jurisdiccional; y procedí a ver en la visión, y sucedió que yo mismo estaba junto a la corriente de agua del Ulai.
Cuando levanté los ojos, entonces vi, y, ¡mire!, un carnero parado delante de la corriente de agua, y tenía dos cuernos. Y los dos cuernos eran altos, pero el uno era más alto que el otro, y el más alto fue el que subió después.
Vi al carnero dando cornadas al oeste y al norte y al sur, y ninguna bestia salvaje se mantuvo de pie delante de él, y no había nadie que librara de su mano. E hizo según su voluntad, y se dio grandes ínfulas.
Y yo, por mi parte, seguí considerando, y, ¡mire!, había un macho de las cabras que venía del poniente sobre la superficie de toda la tierra, y no tocaba la tierra. Y en lo que respecta al macho cabrío, había un cuerno conspicuo entre sus ojos.
Y siguió viniendo hasta el carnero que poseía los dos cuernos, el cual yo había visto parado delante de la corriente de agua; y vino corriendo hacia él en su poderosa furia.
Y lo vi entrar en contacto estrecho con el carnero, y empezó a mostrar amargura hacia él, y procedió a derribar al carnero y a quebrar sus dos cuernos, y resultó que no hubo poder en el carnero para mantenerse firme delante de él. De modo que lo arrojó a la tierra y lo holló, y resultó que el carnero no tuvo quien lo librara de su mano.
Y el macho de las cabras, por su parte, se dio grandes ínfulas hasta el extremo; pero en cuanto se hizo poderoso, el gran cuerno fue quebrado, y procedieron a subir conspicuamente cuatro en lugar de él, hacia los cuatro vientos de los cielos.
Y siguió haciéndose mayor hasta llegar al mismo ejército de los cielos, de modo que hizo que algunos del ejército y algunas de las estrellas cayeran a la tierra, y se puso a hollarlos.
Y hasta llegar al mismo Príncipe del ejército se dio grandes ínfulas, y de él el [rasgo] constante fue quitado, y el lugar establecido de su santuario fue echado abajo.
Y un ejército mismo fue gradualmente entregado, junto con el [rasgo] constante, debido a transgresión; y siguió arrojando la verdad por tierra, y actuó y tuvo éxito.
Y llegué a oír a cierto santo hablando, y otro santo procedió a decir a aquel que estaba hablando: “¿Cuánto durará la visión del [rasgo] constante y de la transgresión que causa desolación, para hacer tanto [del] lugar santo como [del] ejército cosas para hollar?”.
Entonces aconteció que, mientras yo mismo, Daniel, veía la visión y buscaba un entendimiento, pues, ¡mire!, hubo de pie enfrente de mí alguien [que era] en apariencia como un hombre físicamente capacitado.
Y empecé a oír la voz de un hombre terrestre en medio del Ulai, y procedió a clamar y decir: “Gabriel, haz que ese [que está] allí entienda la cosa vista”.
De modo que vino junto a donde yo estaba de pie, pero cuando vino me aterroricé, de modo que caí sobre mi rostro. Y él procedió a decirme: “Entiende, oh hijo del hombre, que la visión es para el tiempo de[l] fin”.
Y mientras estaba hablando conmigo, yo me había quedado profundamente dormido sobre mi rostro en la tierra. Por lo tanto, él me tocó e hizo que me pusiera de pie donde yo había estado parado.
Y puesto que ese fue quebrado, de modo que hubo cuatro que finalmente se levantaron en lugar de él, hay cuatro reinos de [su] nación que se pondrán de pie, pero no con su poder.
”Y en la parte final del reino de ellos, a medida que los transgresores actúen hasta lo completo, se pondrá de pie un rey de fiero semblante y que entenderá dichos ambiguos.
Y su poder tiene que hacerse potente, pero no por su propio poder. Y de manera maravillosa causará ruina, y ciertamente tendrá éxito y obrará con eficacia. Y realmente reducirá a la ruina a poderosos, también al pueblo hecho de [los] santos.
Y según su perspicacia ciertamente también hará que el engaño tenga éxito en su mano. Y en su corazón se dará grandes ínfulas, y durante un [tiempo] libre de cuidados arruinará a muchos. Y contra el Príncipe de príncipes se pondrá de pie, pero será sin mano como será quebrado.
”Y la cosa que se ha visto acerca de la tarde y la mañana, de que se ha dicho, es verdadera. Y tú, por tu parte, guarda secreta la visión, porque es todavía para muchos días”.
Y en cuanto a mí, Daniel, me sentí agotado y quedé enfermo por [varios] días. Entonces me levanté e hice el trabajo del rey; pero seguí mostrándome aturdido a causa de la cosa vista, y no había nadie que [la] entendiera.
en el primer año de reinar él, yo mismo, Daniel, discerní por los libros el número de los años acerca de los cuales la palabra de Jehová había ocurrido a Jeremías el profeta,o para cumplir las devastaciones de Jerusalén,p [a saber,] setenta años.q
Y empecé a orar a Jehová mi Dios y a hacer confesión y decir: “Ah, Jehová el Dios [verdadero], el Grande e Inspirador de temor, que guarda el pacto y la bondad amorosa a los que lo aman y a los que guardan sus mandamientos,
nosotros hemos pecado y hecho lo malo y actuado inicuamente y nos hemos rebelado; y ha habido un desviarnos de tus mandamientos y tus decisiones judiciales.
Y no hemos escuchado a tus siervos los profetas, quienes han hablado en tu nombre a nuestros reyes, nuestros príncipes y nuestros antepasados y a toda la gente de la tierra.
A ti, oh Jehová, pertenece la justicia, pero a nosotros la vergüenza de rostro, como en este día, a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén y a todos los de Israel, los que están cerca y los que están lejos en todas las tierras a las cuales los dispersaste debido a su infidelidad con la cual actuaron contra ti.
”Oh Jehová, a nosotros pertenece la vergüenza de rostro, a nuestros reyes, a nuestros príncipes y a nuestros antepasados, porque hemos pecado contra ti.
Y no hemos obedecido la voz de Jehová nuestro Dios por medio de andar en sus leyes que él colocó delante de nosotros por la mano de sus siervos los profetas.
Y todos los de Israel han traspasado tu ley, y ha habido un desviarse al no obedecer tu voz, de modo que derramaste sobre nosotros la maldición y el firme juramento que está escrito en la ley de Moisés el siervo del Dios [verdadero], porque hemos pecado contra Él.
Y procedió a ejecutar sus palabras que había hablado contra nosotros y contra nuestros jueces que nos juzgaron, y trajo sobre nosotros gran calamidad, tal que no se ha hecho bajo todos los cielos como lo que se ha hecho en Jerusalén.
Tal como está escrito en la ley de Moisés, toda esta calamidad... ha venido sobre nosotros, y no hemos ablandado el rostro de Jehová nuestro Dios volviéndonos de nuestro error y mostrando perspicacia en tu apego a la verdad.
”Y Jehová se mantuvo alerta a la calamidad y finalmente la trajo sobre nosotros, porque Jehová nuestro Dios es justo en todas sus obras que ha hecho; y nosotros no hemos obedecido su voz.
”Y ahora, oh Jehová nuestro Dios, tú que sacaste a tu pueblo de la tierra de Egipto por mano fuerte y procediste a hacer un nombre para ti como en este día, hemos pecado, hemos actuado inicuamente.
Oh Jehová, según todos tus actos de justicia, por favor, vuélvase tu cólera y tu furia de contra tu ciudad Jerusalén, tu santa montaña; porque, debido a nuestros pecados y debido a los errores de nuestros antepasados, Jerusalén y tu pueblo son objeto de oprobio a todos los que están en derredor de nosotros.
Y ahora escucha, oh nuestro Dios, la oración de tu siervo, y sus súplicas, y haz que tu rostro brille sobre tu santuario que está desolado, por causa de Jehová.
Inclina tu oído, oh Dios mío, y oye. Dígnate abrir los ojos y ve nuestras condiciones de desolación y la ciudad que ha sido llamada por tu nombre; porque no según nuestros actos justos dejamos que nuestras súplicas caigan delante de ti, sino según tus muchas misericordias.
Oh Jehová, sí oye. Oh Jehová, sí perdona. Oh Jehová, sí presta atención y actúa. No tardes, por causa de ti mismo, oh Dios mío, porque tu propio nombre ha sido llamado sobre tu ciudad y sobre tu pueblo”.
Mientras yo todavía estaba hablando y orando y confesando mi pecado y el pecado de mi pueblo Israel y dejando que mi petición de favor cayera delante de Jehová mi Dios en cuanto a la santa montaña de mi Dios,
y [mientras] todavía estaba hablando en la oración, pues, el hombre Gabriel, a quien había visto en la visión al comienzo, habiendo quedado rendido de cansancio, estaba llegando junto a mí al tiempo de la ofrenda de la dádiva de la tarde.
Al comienzo de tus súplicas salió una palabra, y yo mismo he venido a dar informe, porque eres alguien muy deseable.l Así que da consideraciónm al asunto, y ten entendimiento en la cosa vista.
”Hay setenta semanas que han sido determinadas sobre tu pueblon y sobre tu santa ciudad,o para poner fin a la transgresión,p y para acabar con el pecado,q y para hacer expiación por el error,r y para introducir la justicia para tiempos indefinidos,s y para imprimir un sellot sobre visión y profeta, y para ungir el Santo de los Santos.u
Y debes saber y tener la perspicacia [de que] desde la salida de [la] palabraa de restaurar y reedificar a Jerusalénb hasta Mesíasc [el] Caudillo,d habrá siete semanas, también sesenta y dos semanas.e Ella volverá y será realmente reedificada, con plaza pública y foso, pero en los aprietos de los tiempos.
”Y después de las sesenta y dos semanas Mesías será cortado,f con nada para sí.g ”Y a la ciudad y al lugar santoh el pueblo de un caudillo que viene los arruinará.i Y el fin del tal será por la inundación. Y hasta [el] fin habrá guerra; lo que está decidido es desolaciones.j
”Y él tiene que mantener [el] pactok en vigor para los muchos por una semana;l y a la mitad de la semana hará que cesen el sacrificio y la ofrenda de dádiva.m ”Y sobre el ala de cosas repugnantes habrá el que cause desolación;n y hasta un exterminio, la misma cosa que se ha decidido irá derramándose también sobre el que yace desolado”.o
En el tercer año de Ciro el rey de Persia un asunto fue revelado a Daniel, a quien se llamó por nombre Beltsasar; y el asunto era verdadero, y había un gran servicio militar. Y él entendió el asunto, y tuvo entendimiento en la cosa vista.
Y su cuerpo era como crisólito, y su rostro como la apariencia del relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos y el lugar de sus pies eran como la vista de cobre bruñido, y el sonido de sus palabras era como el sonido de una muchedumbre.
Y yo vi, yo Daniel por mí mismo, el aparecimiento; pero en cuanto a los hombres que se hallaban conmigo, no vieron el aparecimiento. No obstante, hubo un gran temblor que cayó sobre ellos, de modo que se pusieron a correr y esconderse.
Y a mí... a mí se me dejó solo, de modo que vi este gran aparecimiento. Y no quedó en mí ningún poder, y mi propia dignidad llegó a cambiarse sobre mí hasta arruinamiento, y no retuve ningún poder.
Y empecé a oír el sonido de sus palabras; y al oír el sonido de sus palabras, sucedió que también me hallé profundamente dormido sobre mi rostro, rostro a tierra.
Y procedió a decirme: “Oh Daniel, hombre muy deseable, ten entendimiento en las palabras que te hablo, y ponte de pie donde estabas parado, porque ahora he sido enviado a ti”. Y cuando él habló conmigo esta palabra, sí me puse de pie, retemblando.
Y pasó a decirme: “No tengas miedo,a oh Daniel, porque desde el primer día que diste tu corazón a entenderb y a humillarte delante de tu Diosc tus palabras han sido oídas, y yo mismo he venido a causa de tus palabras.d
Pero el príncipee de la región real de Persiaf estuvo plantado en oposicióng a mí por veintiún días, y, ¡mira!, Miguel,h uno de los príncipes prominentes,i vino a ayudarme; y yo, por mi parte, permanecí± allí al lado de los reyes de Persia.j
Y he venido a hacer que disciernas lo que acaecerá a tu pueblok en la parte final de los días,l porque es una visiónm todavía para los días [venideros]”.n
Y, ¡mire!, uno parecido a la semejanza de los hijos de la humanidad estaba tocando mis labios,p y empecé a abrir la boca y hablarq y decir al que estaba de pie enfrente de mí: “Oh mi señor,r debido al aparecimiento mis convulsiones fueron vueltas dentro de mí, y no retuve ningún poder.s
Así que, ¿cómo podría el siervo de este mi señor hablar con este mi señor? Y en cuanto a mí, hasta ahora no siguió subsistiendo en mí ningún poder, y ningún aliento en absoluto quedó en mí”.
Entonces dijo: “No tengas miedo, oh hombre muy deseable. Ten paz. Sé fuerte, sí, sé fuerte”. Y tan pronto como habló conmigo ejercí mi fuerza y finalmente dije: “Hable mi señor, porque me has fortalecido”.
Así que pasó a decir: “¿Sabes realmente por qué he venido a ti? Y ahora regresaré a pelear con el príncipe de Persia. Cuando yo vaya saliendo, ¡mira!, también el príncipe de Grecia viene.
No obstante, te informaré las cosas apuntadas en la escritura de la verdad, y no hay nadie que resulte fuerte conmigo en estas [cosas] sino Miguel, el príncipe de ustedes.
Lo que te voy a decir es verdad:g ”¡Mira! Surgirán tres reyes más en Persia,h y el cuartoi acumulará mayores riquezas que todos los demás.j Y, cuando se vuelva fuerte debido a sus riquezas, movilizará todo contra el reino de Grecia.k
Sin embargo, cuando haya surgido,n su reino será fragmentado y esparcido hacia los cuatro vientoso de los cielos,p pero no será para sus descendientesq ni será tan poderoso como cuando él gobernaba. Su reino será arrancado de raíz y pasará a otros que no son estos.
”Y el rey del sur, es decir, uno de sus príncipes, se volverá fuerte. Pero otro se impondrá y gobernará con gran poder, con una autoridad mucho mayor que la del anterior.
”Años después, ellos harán una alianza, y la hija del rey del sur irá adonde está el rey del norte para establecer el pacto. Pero ella no conservará el poder de su brazo.r Y él no se mantendrá en pie, ni tampoco su brazo. Ella será entregada, ella y los que la llevaron, y el que causó su nacimiento, y el que la hizo fuerte en esos tiempos.
Y en lugar de él surgirá un brotea de las raíces de ella. Entonces él saldrá al ejército y saldrá contra la fortaleza del rey del norte, los atacará y vencerá.
También se llevará a Egipto los dioses de ellos,b sus imágenes de metal, sus valiosos objetos de plata y de oro, y cautivos. Y durante algunos años se mantendrá alejado del rey del norte,
”Sin embargo, sus hijos se prepararán para la guerra y reunirán un ejército grande y numeroso. Él avanzará y se extenderá como una inundación. Pero volverá atrás y luchará hasta llegar a su fortaleza.
”El rey del sur se enojará y saldrá a luchar contra él, es decir, contra el rey del norte. Este reunirá a una gran multitud, pero esta caerá en manos del otro.c
”Y el rey del norte regresará y reunirá a una multitud más grande que la primera. Al cabo de cierto tiempo, después de algunos años, saldrá con un ejército enormee y con muchos recursos.f
En esos tiempos se levantarán muchos contra el rey del sur. ”Y los violentos de tu pueblo serán empujados a tratar de hacer realidad una visión,g pero tropezarán.h
”Entonces el rey del norte saldrá, levantará una rampai de ataque y capturará una ciudad fortificada. Y los brazos del sur no resistirán, ni tampoco sus mejores hombres. No tendrán fuerzas para resistir.
El que sale contra él hará lo que quiera, y nadie podrá hacerle frente. Se plantará en la Tierra Hermosaa y tendrá en su manob la capacidad de exterminar.
Estará resueltoc a salir con todas las fuerzas de su reino, y habrá un pactod con él; y él hará lo que se proponga.e En cuanto a la hija de las mujeres, a él se le permitirá destruirla. Ella no resistirá y no continuará siendo de él.f
Y él dirigirá su atención hacia las tierras costerasg y conquistará muchas. Pero un comandante pondrá fin a las humillaciones que este le causó, y esas humillaciones acabarán. Y hará que sus humillaciones se vuelvan sobre él.
”En su lugar surgirái alguien que hará pasar un exactorj por el reino espléndido, pero a los pocos días será destruido, aunque no será con furia ni en una guerra.
”En su lugar surgirá alguien despreciado,k y no le darán la majestad del reino. Llegará en un tiempo de seguridadl y se apoderará del reino con halagos.m
Durante un tiempo de seguridada entrará en las regiones más ricas de la provincia y hará lo que no hicieron sus padres ni los padres de ellos. Repartirá el botín, los despojos y las riquezas entre ellos. También tramaráb planes malvados contra fortalezas, pero solo durante un tiempo.
”Y él reunirá fuerzas y valor para ir contra el rey del sur con un gran ejército, y el rey del sur se preparará para la guerra con un ejército inmensamente grande y poderoso. Pero él no se mantendrá en pie, porque tramarán planes malvados contra él.
”En cuanto a estos dos reyes, su corazón se inclinará a hacer lo que es malo, y ellos se sentarán a una misma mesac diciéndosed mentiras el uno al otro. Pero nada tendrá éxito,e porque el fin es todavía para el tiempo fijado.f
”Y él regresará a su país con una gran cantidad de riquezas, y su corazón estará en contra del pacto santo.g Hará lo que se propongah y regresará a su país.
porque las naves de Kitimk irán contra él, y él será humillado. ”Entonces regresará y descargará su furial contra el pacto santom y hará lo que se proponga. Él regresará y prestará atención a los que dejan el pacto santo.
Se alzarán brazos procedentes de él, y ellos profanarán el santuario,n la fortaleza, y quitarán el sacrificio constante.a ”Y pondrán la cosa repugnanteb y devastadora.c
”Con halagosf él llevará a la apostasíae a los que actúan perversamente contra el pacto.d Pero el pueblo que conoce a su Diosg venceráh y hará lo que se proponga.
Y los perspicacesi de entre la gente harán entender a muchos.j Durante unos días se les hará tropezar con espada y con fuego, con cautiverio y con saqueo.k
Y se hará tropezarn a algunos de los perspicaces para hacer una refinación debido a ellos y para hacer una purificación y un blanqueamientoo hasta el tiempo del fin;p porque esto es todavía para el tiempo fijado.q
”El rey hará lo que quiera; se ensalzará y se engrandecerá por encima de todos los dioses,r y dirá cosas sorprendentes contra el Dios de dioses.s Y tendrá éxito hasta que la furia llegue a su fin,t porque lo que está decidido tiene que suceder.
No mostrará respeto por el Dios de sus padres, ni mostrará respeto por el deseo de las mujeres ni por ningún otro dios, sino que se engrandeceráu por encima de todos.
En cambio, le dará gloria al dios de las fortalezas. Con oro, plata, piedras preciosas y cosas valiosas le dará gloria a un dios que sus padres no conocieron.
Hará lo que se proponga contra las fortalezas más reforzadas, junto con un dios extranjero. Les dará gloria a los que lo apoyen y hará que ellos gobiernen a muchos. Repartirá el suelo a cambio de un precio.
”En el tiempo del fin, el rey del surb se envolverá en un conflicto con él. Entonces el rey del norte arremeterá contra él con carros, jinetes y muchas naves. Invadirá los países y pasará como una inundación.
También invadirác la Tierra Hermosa.d Se hará tropezare a muchos países. Pero estos son los que se librarán de su mano: Edom, Moabf y la parte principal de los ammonitas.
”Y durante aquel tiempo se pondrá de pie Miguel, el gran príncipe que está plantado a favor de los hijos de tu pueblo. Y ciertamente ocurrirá un tiempo de angustia como el cual no se ha hecho que ocurra uno desde que hubo nación hasta aquel tiempo. Y durante aquel tiempo tu pueblo escapará, todo el que se halle escrito en el libro.
Y habrá muchos de los que están dormidos en el suelo de polvo que despertarán, estos a vida de duración indefinida y aquellos a oprobios [y] a aborrecimiento de duración indefinida.
”Y los que tengan perspicacia brillarán como el resplandor de la expansión;n y los que traigan a los muchos a la justicia,o como las estrellas hasta tiempo indefinido, aun para siempre.
”Y en cuanto a ti, oh Daniel, haz secretas las palabras y sella el libro,p hasta el tiempo de[l] fin.q Muchos discurrirán, y el [verdadero] conocimiento se hará abundante”.r
Entonces uno dijo al hombre vestido del lino, quien estaba arriba sobre las aguas de la corriente: “¿Cuánto pasará hasta el fin de las cosas maravillosas?”.
Y empecé a oír al hombre que estaba vestido del lino, quien estaba arriba sobre las aguas de la corriente, mientras él procedió a levantar la [mano] derecha y la [mano] izquierda a los cielos y a jurar por Aquel que está vivo para tiempo indefinido: “Será por un tiempo señalado, tiempos señalados y medio. Y tan pronto como haya habido un fin del hacer añicos el poder del pueblo santo, todas estas cosas llegarán a su fin”.
Muchos se limpiaránf y se emblanqueceráng y serán refinados.h Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente,i y absolutamente ningún inicuo entenderá;j pero los que tengan perspicacia entenderán.k
”Y desde el tiempo en que el [rasgo] constante haya sido removido, y haya habido una colocación de la cosa repugnante que está causando desolación, habrá mil doscientos noventa días.