Uno de los cabezas paternos de Israel, centenares de cuyos descendientes volvieron del exilio babilonio con Zorobabel. (Esd 2:15; Ne 7:20.) Posteriormente, en 468 a. E.C., regresaron con Esdras otras 51 personas de su linaje. (Esd 8:6.) Un representante principesco de la casa paterna de Adín estaba entre aquellos que autenticaron el “arreglo fidedigno” realizado en los días de Nehemías. (Ne 9:38; 10:1, 16.)
1. Adná, Israelita descendiente de la casa paterna de Pahat-moab.
1. Adná, Israelita descendiente de la casa paterna de Pahat-moab que estuvo entre los que concordaron en despedir a sus esposas no israelitas, durante la purificación que tuvo lugar como resultado del consejo del sacerdote Esdras. (Esd 10:30, 44.)
2. Adná, Sacerdote perteneciente a la casa paterna de Harim. Vivió en los días del sumo sacerdote Joiaquim, de Nehemías y del sacerdote Esdras. (Ne 12:12-15, 26.)
1. Ahitub, Descendiente de Itamar, uno de los hijos de Aarón.
1. Ahitub, Descendiente de Itamar, uno de los hijos de Aarón. Ahitub fue hijo de Finehás y nieto del sumo sacerdote Elí. (1Sa 14:3; 1Cr 24:3.) Es posible que oficiara de sumo sacerdote después de la muerte de su padre y de su abuelo, ambas ocurridas en el mismo día. (1Sa 4:17, 18.) Su hijo, el sumo sacerdote Ahimélec, fue asesinado por orden de Saúl. (1Sa 22:9-20.)
2. Ahitub, Hijo de Amarías, un descendiente de Eleazar, uno de los hijos de Aarón. (1Cr 6:3-8.) No se dice que oficiara de sumo sacerdote; este puesto se hallaba por entonces en la línea familiar de Itamar. Durante el reinado de David, Sadoc, el hijo de Ahitub, ejerció el sacerdocio, aunque no ofició de sumo sacerdote, pero durante el reinado de Salomón, se le designó para ese puesto como sustituto de Abiatar. (2Sa 8:17; 1Cr 18:16; 1Re 1:8; 2:27.)
3. Ahitub, Otro sacerdote; fue descendiente de Ahitub (núm. 2). La secuencia de las listas genealógicas se interrumpe para apostillar respecto a él: “Un caudillo de la casa del Dios verdadero”. (1Cr 9:11; Ne 11:11.) Su padre también se llamó Amarías, y de 1 Crónicas 9:11 y Nehemías 11:11 se desprende que su hijo fue Merayot y su nieto, Sadoc. (1Cr 6:11, 12; Esd 7:2.)
1. Amram - (Amramitas), Nieto de Leví por medio de Qohat.
1. Amram - (Amramitas) Nieto de Leví por medio de Qohat. (Éx 6:16, 18, 20; Nú 3:19; 26:58; 1Cr 6:18.) Se dice que se casó con Jokébed, la “hermana de su padre”, matrimonio permitido en aquel entonces, pero que más tarde prohibió la ley mosaica. (Le 18:12.) No obstante, algunas traducciones dicen que era su prima. Sus hijos fueron Aarón, Míriam y Moisés. (Éx 6:20; Nú 26:59; 1Cr 6:2, 3; 23:12, 13.)
★Amramitas
(De [Pertenecientes a] Amram).
Descendientes de Amram, el nieto de Leví por medio de Qohat. Integraban una subdivisión de la familia de los qohatitas. Durante la travesía por el desierto, acamparon al S. del tabernáculo junto a todas las familias de los hijos de Qohat. La obligación encomendada a los qohatitas era cuidar del Arca, la mesa, el candelabro, los altares, los utensilios y las pantallas que se encontraban entre el Santo y el Santísimo. (Nú 3:27-31; 1Cr 26:23.)
2. Amram, Uno de “los hijos de Baní”; en el año 468 a. E.C., él y otros repatriados respondieron al llamamiento de despedir a las esposas extranjeras que habían tomado. (Esd 10:34, 44.)
3. Amram, Nombre que se atribuye a un seirita, hijo de Disón, en la traducción que hace la Versión Valera de 1 Crónicas 1:41. (Véase HEMDÁN.)
Asbel fue uno de los hijos de Benjamín, el tercero según Génesis 46:21, aunque 1 Crónicas 8:1 dice que fue el segundo. Llegó a Egipto en 1728 a. E.C. con la familia de Jacob. Al parecer, el nombre de Jediael, empleado en 1 Crónicas 7:6, 10, corresponde al mismo Asbel. A sus descendientes, los asbelitas, se les inscribió en el censo hecho en las llanuras desérticas de Moab hacia 1473 a. E.C. (Nú 26:38.)
Nombre de una o tal vez dos personas distintas mencionadas en las genealogías de Génesis 36:20-28 y 1 Crónicas 1:38-42.
En Génesis 36:20, 21 (también vss. 29, 30), se mencionan siete jeques “hijos de Seír el horeo”: Lotán, Sobal, Zibeón, Anah, Disón, Ézer y Disán. Más adelante, en los versículos 22 a 28, se menciona a cada uno de estos jeques con sus respectivos hijos. En el versículo 25 se dice que uno de los hijos de Anah fue Disón. Hay quienes opinan que si se interpreta que los siete jeques eran “hijos” de Seír en el sentido estricto del término, este último Disón era nieto de Seír y sobrino del jeque Disón.
Sin embargo, otros creen que los siete jeques no son “hijos” de Seír en el sentido estricto de la palabra, sino tan solo sus descendientes, por lo que opinan que el Disón del versículo 25 es el mismo jeque Disón (Gé 36:21, 26) y no su sobrino. Según esto, Disón sí es el hijo del jeque Anah, pero se le menciona entre los siete hermanos, no porque lo fuese, sino porque tenía el rango de jeque, como los otros seis.
1. Ébed, Padre de Gaal, quien dirigió a los terratenientes de Siquem en una rebelión infructuosa contra Abimélec. (Jue 9:26, 29, 39-41.)
2. Ébed, Hijo de Jonatán. Ébed y cincuenta varones de la casa paterna de Adín regresaron con Esdras de Babilonia a Jerusalén. (Esd 8:6.)
Nombre hebreo mencionado por primera vez por el profeta (Isaías 7:14; 8:8, 10) durante el reinado de Acaz (761-746 a. E.C.). La única otra ocasión en que aparece el nombre Emmanuel, en Mateo 1:23, es uno de los nombres que se usa como título profético para referirse a Cristo el Mesías.
En vista de las circunstancias en las que se dio la profecía, los comentaristas bíblicos han intentado identificar a un “Emmanuel” de los días de Isaías de quien se pudiera decir que sirvió de señal de que ‘Dios estaba con ellos’. En el siglo VIII a. E.C. Péqah y Rezín, los reyes de Israel y Siria, estaban resueltos a derrocar a Acaz, el rey de Judá, a fin de colocar al hijo de Tabeel sobre su trono. (Isa 7:1-6.) Jehová, sin embargo, recordó el pacto para un reino que había hecho con David, el antepasado de Acaz, y envió a su profeta con este mensaje consolador:
“Escuchen, por favor, oh casa de David. [...] Jehová mismo les dará una señal: ¡Miren! La doncella misma realmente quedará encinta, y va a dar a luz un hijo, y ciertamente le pondrá por nombre Emmanuel. Mantequilla y miel comerá él para cuando sepa rechazar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el muchacho sepa rechazar lo malo y escoger lo bueno, el suelo de aquellos dos reyes que te hacen sentir pavor morboso será dejado enteramente.” (Isa 7:13-16.)
Después de hablar acerca del nacimiento del segundo hijo de Isaías, Maher-salal-has-baz, la profecía describe cómo se eliminaría la amenaza que se cernía sobre Judá. Como si de una inundación se tratara, los asirios inundarían Siria por completo y el reino norteño de Israel, no deteniéndose hasta que se hubiesen extendido peligrosamente sobre la tierra de Judá, incluso “¡[...] para llenar la anchura de tu tierra, oh Emmanuel!”. A continuación el profeta Isaías advierte con grandiosidad poética a todos los opositores de Jehová que si se ciñen para la guerra, si planean un proyecto, si hablan una palabra en contra de Jehová, “¡[...] no subsistirá, porque Dios está con nosotros [Emmanuel]!”. (Isa 8:5-10.)
Se ha dicho que la profecía relativa a “Emmanuel” tuvo un primer cumplimiento en un tercer hijo de Isaías que le dio una doncella judía que llegó a ser su segunda esposa. Algunos comentaristas judíos han intentado aplicar la profecía al nacimiento del hijo de Acaz, Ezequías. No obstante, este no podría ser el caso, pues la profecía se dio durante el reinado de Acaz (Isa 7:1), cuando Ezequías ya tenía por lo menos nueve años de edad. (2Re 16:2; 18:1, 2.)
También se ha aplicado al segundo hijo de Isaías, mencionado en el siguiente capítulo, Maher-salal-has-baz, concerniente a quien se dijo: “Antes que el muchacho sepa clamar: ‘¡Padre mío!’, y: ‘¡Madre mía!’, uno se llevará los recursos de Damasco y el despojo de Samaria delante del rey de Asiria”. (Isa 8:1-4.) Estas palabras guardan cierta relación con lo que se dijo de Emmanuel: “Porque antes que el muchacho sepa rechazar lo malo y escoger lo bueno, el suelo de aquellos dos reyes [de Damasco y Samaria] que te hacen sentir pavor morboso será dejado enteramente”. (Isa 7:16.) Además, el nacimiento del segundo hijo de Isaías se presenta en el contexto de la profecía sobre Emmanuel, y se hace otro paralelo: se dice que él será una “señal” e Isaías afirma sobre sí mismo y sobre sus hijos: “Yo y los hijos que Jehová me ha dado somos como señales”. (Isa 7:14; 8:18.)
La principal objeción a identificar a este segundo hijo de Isaías como Emmanuel en el tiempo de Acaz es que se hace referencia a la esposa de Isaías como “la profetisa”, no como la “doncella”, pues ya era madre del primogénito de Isaías, Sear-jasub. (Isa 7:3; 8:3.) No obstante, debe notarse que el término hebreo que se traduce “doncella” no es bethu·láh, que significa específicamente “virgen”, sino `al·máh, cuyo significado es más amplio, pues hace referencia a una joven que podría ser tanto una doncella virgen como una recién casada. El singular `al·máh también aparece en otros seis textos, y más de uno de ellos tienen que ver con una doncella virgen. (Gé 24:43 [compárese con el vs. 16]; Éx 2:8; Sl 68:25; Pr 30:19; Can 1:3; 6:8.)
En el cumplimiento final de la profecía, se identifica a Emmanuel, por supuesto, con la persona del Señor Jesucristo y las funciones que desempeña. Por lo tanto, el uso de la palabra hebrea `al·máh en la profecía aplicaría tanto al tipo (si se trataba de una joven esposa de Acaz o de Isaías) como al antitipo (la comprometida y todavía virgen María). En el caso de María no había ninguna duda de que fuese virgen cuando quedó “encinta por espíritu santo”, pues tanto Mateo como Lucas registraron este hecho. (Mt 1:18-25; Lu 1:30-35.) “Todo esto realmente pasó para que se cumpliera lo que Jehová había hablado por su profeta”, dijo Mateo. Era una señal que identificaba al Mesías por tanto tiempo esperado. Por consiguiente, al tratar sobre estos hechos, el evangelio de Mateo (citando Isaías 7:14) usa la palabra griega par·thé·nos, que significa “virgen”, para traducir `al·máh, diciendo: “¡Miren! La virgen [par·thé·nos] quedará encinta y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel”. (Mt 1:22, 23.) Esto no significa de ninguna manera que Mateo se estuviera tomando libertades o estuviera deformando el texto. Alrededor de un siglo antes los traductores judíos de la Versión de los Setenta griega también habían usado par·thé·nos al traducir Isaías 7:14.
Esta identidad de Jesucristo como Emmanuel no significaba que fuera la encarnación de Dios, ‘Dios hecho carne’, como afirman los defensores de la doctrina de la Trinidad que está implicado en el significado de Emmanuel, a saber: “Con nosotros está Dios”. Los judíos tenían la costumbre de incluir la palabra Dios, e incluso Jehová, en los nombres propios hebreos. Ese nombre todavía se usa en la actualidad, sin que de ello puedan derivarse ningún tipo de implicaciones.
Si bien parece haber un conflicto entre las instrucciones del ángel a María (“has de ponerle por nombre Jesús”) y la profecía de Isaías (“ciertamente le pondrá por nombre Emmanuel”), hay que recordar que al Mesías también se le tendría que llamar incluso por otros nombres. (Lu 1:31; Isa 7:14.) Por ejemplo, Isaías 9:6 dijo concerniente a él: “Por nombre se le llamará Maravilloso Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz”. Sin embargo, al primogénito de María no se le dio ninguno de estos nombres como nombre personal, ni de pequeño ni después de emprender su ministerio. Más bien, todos eran nombres proféticos o títulos mediante los que se identificaría al Mesías. Jesús vivió de acuerdo con el significado de estos nombres en todo respecto, y por eso se dieron proféticamente, para mostrar sus cualidades y las buenas funciones que desempeñaría para con todos aquellos que le aceptasen como Mesías. Así fue también en el caso de su título Emmanuel. Jesús estuvo a la altura del significado de ese nombre, y lo cumplió.
Los adoradores de Jehová siempre han deseado que Dios esté con ellos, de parte suya, apoyándolos en sus empresas, y a menudo Él les confirma que lo está, dándoles a veces señales visibles como prueba. (Gé 28:10-20; Éx 3:12; Jos 1:5, 9; 5:13–6:2; Sl 46:5-7; Jer 1:19.) Tal vez Jehová dispusiese que la identidad del Emmanuel de los días de Acaz permaneciera incierta a fin de no distraer la atención de las generaciones futuras del Emmanuel Mayor, cuando este viniera como señal del cielo. Con la venida de su amado Hijo a la Tierra en calidad de la prometida “descendencia” mesiánica (Gé 3:15) y heredero legal al trono de David, Jehová estaba proporcionando su mayor señal de que no había abandonado a la humanidad ni su pacto del Reino. La designación Emmanuel, por lo tanto, era particularmente apropiada para Cristo, puesto que su presencia fue una señal del cielo. Él fue el mayor representante de Jehová que habitó entre la humanidad, por lo que Mateo pudo decir bajo inspiración: “Con nosotros está Dios”.
Hijo de Ébed que fue a Siquem junto con sus hermanos y consiguió la confianza de los terratenientes de aquel lugar. (Jue 9:26.) Estos terratenientes anteriormente habían fortalecido la mano de Abimélec para matar a los hijos de Jerubaal (Gedeón) y luego habían procedido a hacerle rey sobre ellos. (Jue 9:1-6.) Al parecer, Abimélec nombró a Zebul príncipe residente de Siquem, mientras que él mismo vivía en Arumá; pero con el tiempo surgió un mal espíritu entre Abimélec y los terratenientes de Siquem. Como resultado, Gaal y sus hermanos incitaron a la ciudad a sublevarse contra Abimélec. Cuando Zebul se enteró de este suceso, envió inmediatamente un mensaje a Abimélec con una recomendación en cuanto a cómo enfrentarse a la situación que había surgido. Finalmente, Gaal y los que estaban con él fueron derrotados en la batalla que se entabló con el rey Abimélec y huyeron de regreso a la ciudad. Más tarde, Zebul echó a Gaal y a sus hermanos de Siquem. (Jue 9:22-41.)
Cabeza del pueblo, o su descendiente, que autenticó con sello el contrato de confesión redactado durante la gobernación de Nehemías. (Ne 9:38; 10:1, 14, 25.)
1. Hasabneya, Padre de Hatús. Este último realizó reparaciones en el muro de Jerusalén. (Ne 3:10.)
2. Hasabneya, Uno de los ocho levitas que hicieron un llamamiento a los hijos de Israel para que bendijesen a Jehová y su glorioso nombre, tras lo cual repasaron la relación de Dios con la nación antes de autenticar con sello el contrato de confesión redactado durante la gobernación de Nehemías. (Ne 9:5, 38.) Como sugiere la lectura de la Peshitta siriaca, quizás se tratase de uno de los levitas llamados Hasabías, como el que se menciona en Esdras 8:19 o en Nehemías 10:11.
1. Hatús, Cabeza sacerdotal que volvió de Babilonia con Zorobabel.
1. Hatús, Cabeza sacerdotal que volvió de Babilonia con Zorobabel en 537 a. E.C. (Ne 12:1, 2, 7.)
2. Hatús, Hijo de Semaya, descendiente de David por el linaje de Salomón. (1Cr 3:1, 10, 22.)
3. Hatús, Cabeza de la casa paterna de los hijos de David que regresó a Jerusalén con Esdras en 468 a. E.C. (Esd 8:1, 2.) Es posible que fuese el mismo que el núm. 2.
4. Hatús, Hijo de Hasabneya; colaboró en la reparación del muro de Jerusalén en el tiempo de Nehemías. (Ne 3:10.)
5. Hatús, Sacerdote, o su antepasado, que autenticó con su sello el acuerdo de confesión durante la gobernación de Nehemías. (Ne 9:38; 10:1, 4, 8.)
Cabeza de la casa paterna sacerdotal de Merayot en los días del sumo sacerdote Joiaquim. (Ne 12:12, 15.)
Hijo de Disón, que fue hijo de Seír el horeo. (Gé 36:20, 21, 26.) Los horeos habitaron la región montañosa de Seír hasta que los descendientes de Esaú los desposeyeron. (Dt 2:12, 21, 22.) Su nombre se traduce de diversas maneras en 1 Crónicas 1:41: “Hemdán” (NM, VP), “Jamrán” (BJ, LT), “Amram” (BAS, Val) y “Hamram” (MK, Mod).
1. Jamín, Hijo de Simeón mencionado en segundo lugar.
1. Jamín, Hijo de Simeón mencionado en segundo lugar. (Gé 46:10; Éx 6:15; 1Cr 4:24.) Fundó la familia de los jaminitas. (Nú 26:12.)
★Jaminitas
(De [Pertenecientes a] Jamín).
Descendientes de Jamín, de la tribu de Simeón. (Nú 26:12.)
2. Jamín, Descendiente de Judá por medio de Ram, el nieto de Hezrón. (1Cr 2:9, 25, 27.)
3. Jamín, Levita que vivió después del destierro y que ayudó a explicar la Ley al pueblo congregado en Jerusalén. (Ne 8:7.)
1. Jesayá, Descendiente levita de Moisés por medio de Eliezer.
1. Jesayá, Descendiente levita de Moisés por medio de Eliezer y antepasado del Selomot a quien David nombró tesorero. (1Cr 23:15; 26:24-26.)
2. Jesayá, Músico levita de “los hijos de Jedutún”, elegido por suertes para encabezar el octavo de los veinticuatro grupos de músicos que organizó David. (1Cr 25:1, 3, 15.)
3. Jesayá, Antepasado de un benjamita que vivió en Jerusalén durante la gobernación de Nehemías. (Ne 11:4, 7.)
4. Jesayá, Cabeza de la casa paterna de Elam en cuyo grupo había 70 varones que regresaron con Esdras a Jerusalén. (Esd 8:1, 7.)
5. Jesayá, Levita de la familia de Merarí que también volvió de Babilonia con Esdras. (Esd 8:1, 19.)
6. Jesayá, Descendiente del rey David; era nieto del gobernador Zorobabel. (1Cr 3:1, 19, 21.)
Hijo y sucesor del sumo sacerdote postexílico Jesúa. (Ne 12:10, 12, 26.) Debía ocupar el cargo cuando regresó Esdras. (Antigüedades Judías, libro XI, cap. V, sec. 1.) No obstante, cuando más tarde llegó Nehemías (455 a. E.C.), el sumo sacerdote era el hijo de Joiaquim, Eliasib. (Ne 3:1.)
1. Mitrídates, Tesorero de Ciro que por orden real entregó a los israelitas unos 5.400 utensilios de oro y plata del templo cuando regresaron a Jerusalén. (Esd 1:7, 8, 11.)
2. Mitrídates, Opositor a la reconstrucción del templo que se llevó a cabo tras el exilio; junto con varios otros firmó una carta dirigida al rey persa Artajerjes en la que se acusaba falsamente a los judíos. (Esd 4:7.)
Fundador de una familia en Israel. Su nombre parece indicar que fue un alto funcionario de Moab, en cuyo caso probablemente vivió en el tiempo en que Moab se hallaba bajo la dominación de Judá. No obstante, ya que el registro bíblico no dice nada acerca de él personalmente, la citada posición es incierta.
Todos los descendientes de Pahat-moab que se registran en Esdras y Nehemías son postexílicos, y algunos de ellos representaron el segundo grupo familiar más numeroso que regresó con Zorobabel en el año 537 a. E.C. (Esd 2:1, 2, 6; Ne 7:11.) Cuando Esdras regresó en 468 a. E.C. junto con más descendientes de Pahat-moab, algunos del primer grupo, o sus descendientes, habían tomado esposas extranjeras, pero respondieron al consejo de Esdras de despedirlas. (Esd 8:1, 4; 10:30, 44.) Hasub, otro miembro de esta familia, ayudó a Nehemías a reedificar el muro de Jerusalén, y un descendiente o representante de esta también autenticó con su sello el acuerdo de fidelidad que se presentó poco después. (Ne 3:11; 9:38; 10:1, 14.)
1. Sefatías, Uno de los guerreros benjamitas que se pasó de Saúl a David.
1. Sefatías, Uno de los guerreros benjamitas que se pasó de Saúl a David en Ziqlag; era un harifita. (1Cr 12:1, 2, 5.)
2. Sefatías, El quinto hijo que le nació a David mientras gobernaba en Hebrón (1077-1070 a. E.C.). El nombre de su madre era Abital. (2Sa 3:2, 4; 1Cr 3:1, 3.)
3. Sefatías, Príncipe de la tribu de Simeón durante el reinado de David; hijo de Maacá. (1Cr 27:16, 22.)
4. Sefatías, Hijo de Jehosafat; su padre le dio muchos regalos y ciudades fortificadas; más tarde lo asesinó Jehoram, su hermano mayor. (2Cr 21:2-4.)
5. Sefatías, Uno de los príncipes de Judá que echaron a Jeremías a una cisterna después de conseguir el permiso del rey Sedequías para matarlo; era hijo de Matán. (Jer 38:1-6, 10.)
6. Sefatías, Fundador de una familia de Israel de la que 372 varones regresaron a Jerusalén junto con Zorobabel en el año 537 a. E.C., y otros 80, con Zebadías a la cabeza, acompañaron a Esdras en el 468 a. E.C. (Esd 2:1, 2, 4; 8:1, 8; Ne 7:9.)
7. Sefatías, Familia de “los hijos de los siervos de Salomón” que también regresó de Babilonia con Zorobabel. (Esd 2:1, 2, 55, 57; Ne 7:59.)
8. Sefatías, Benjamita, uno de cuyos descendientes vivió en Jerusalén tras el exilio en Babilonia. (1Cr 9:7, 8.)
9. Sefatías, Descendiente de Judá por la línea de Pérez, y antepasado de un hombre que vivió en Jerusalén durante la gobernación de Nehemías. (Ne 11:1, 2, 4.)
1. Utai, Residente postexílico de Jerusalén.
1. Utai, Residente postexílico de Jerusalén; descendiente de Judá por el linaje de Pérez. (1Cr 9:3, 4.)
2. Utai, Cabeza de una casa paterna de los hijos de Bigvai que fue con Esdras a Jerusalén (468 a. E.C.). (Esd 8:1, 14.)
Cabeza de una familia de la tribu de Benjamín. Era hijo de Saharaim y de su esposa Hodes. (1Cr 8:1, 8-10.)