l libro de Jeremías está escrito en un hebreo muy complejo y poético y algunas porciones de los libros de Esdras, Jeremías y Daniel se escribieron en arameo.
obresalir o imponerse [una persona o una cosa] entre otras. 2. Mantenerse o continuar existiendo [una cosa no material].
s una palabra es de uso poco frecuente, se define como la acción y resultado de denunciar o denunciarse, en notificar, avisar en revelar ante las autoridades un delito, designando a la autoría para que sea castigado o delatar. En Sl 7:11 O: “Dios está denunciando”. LXX: “no está desahogando cólera”.
Jeremías 22:30
★ Reyes por mil años sin sucesores.
Si José del linaje real del rey David hubiera querido esperar para otorgar el “derecho legal” al trono davídico a un hijo directo carnal suyo, como Santiago, José (II), Simón o Judas, esta reclamación legal no hubiera entrado en vigor. (Ezequiel 21:27) ¿Por qué no? Porque José era descendiente del rey Salomón por medio de Jeconías (o Conías, o Joaquín), acerca del cual leemos, en Jeremías 22:24-30: “‘¡Tan ciertamente como que vivo yo,’ es la expresión de Jehová, ‘aun si Conías hijo de Joaquim, el rey de Judá, fuese el anillo de sellar sobre mi diestra, de allí te arrancaría!’ . . . Esto es lo que ha dicho Jehová: ‘Inscriban a este hombre como sin hijos [en lo referente a herencia del trono de David], como un hombre físicamente capacitado que no tendrá ningún éxito en sus días; porque de su prole ni uno solo tendrá éxito, de modo que se siente sobre el trono de David y gobierne más en Judá.’” (Mateo 1:11-16) Por consiguiente, el que José confiriera el título legal a su hijo adoptado Jesús no sería vano, puesto que Jesús el hijo de María no llegó a ser descendiente natural de Jeconías (Conías), sino que descendió del rey David por medio de la línea de su hijo Natán el hijo de Bat-seba. Por lo tanto, la genealogía de Jesús según se registra en Lucas 3:23-38 no alista el nombre de Jeconías (Conías, o Joaquín).
n un lugar próximo a otro que se toma como referencia. 2. En un tiempo futuro próximo al momento que se toma como referencia; puede referirse tanto al tiempo del cual se habla como al momento en el que se habla o se escribe.
Dios cumplió su promesa. Tal como había dicho, el rey persa Ciro conquistó Babilonia (Isaías 45:1, 2; Jeremías 51:30-32). Y entonces Ciro permitió que los judíos regresaran a su tierra. Después de 70 años desterrados, volvían a estar en Jerusalén (2 Crónicas 36:20-23; Esdras 3:1).
El hecho de que la promesa de Jeremías 29:11 se haya cumplido nos llena de confianza. Dios cumplirá todas las demás promesas que ha hecho, como la de traer paz a toda la Tierra por medio del Reino de Dios en manos de Jesucristo (Salmo 37:10, 11, 29; Isaías 55:11; Mateo 6:10).
Ideas equivocadas sobre Jeremías 29:11
★Lo que algunos creen: Dios tiene un plan para cada persona.“Llámame, que yo te responderé”. La expresión “llámame” no significa simplemente decir el nombre de Dios en voz alta. También significa orarle para pedirle su ayuda y guía (Salmo 4:1; Jeremías 29:12).
Lo más probable es que estas palabras estuvieran dirigidas a la antigua nación de Israel. Los israelitas habían abandonado a Dios, y el ejército de Babilonia los estaba atacando (Jeremías 32:1, 2). Jehová a los invitó a acercarse otra vez a él y a que le oraran para pedirle ayuda.
“Te contaré cosas grandes e incomprensibles, cosas que tú no sabías”. Las cosas que Dios promete revelar son “incomprensibles” (o inaccesibles) porque de otra manera los seres humanos nunca podrían enterarse de ellas. La expresión “cosas incomprensibles” también puede traducirse como “cosas ocultas”.
¿Qué “cosas ocultas” revelaría Dios? Lo que iba a pasar en el futuro, es decir, que la antigua ciudad de Jerusalén sería destruida y quedaría deshabitada, y que luego sería reconstruida (Jeremías 30:1-3; 33:4, 7, 8). Pero Dios también dijo que su pueblo en conjunto no desaparecería (Jeremías 32:36-38).
El profeta Jeremías recibió este mensaje de Jehová en el año 608 antes de nuestra era, cuando el rey Sedequías llevaba 10 años gobernando. Jeremías había predicho que Jerusalén caería en manos de los babilonios y que Sedequías sería capturado. Como al rey no le gustó lo que Jeremías había dicho, lo puso bajo custodia (Jeremías 32:1-5; 33:1; 37:21).En medio de toda esta situación, Dios dijo las palabras de Jeremías 33:3. Pero el rey Sedequías y gran parte de la nación no llamaron a Jehová, no lo buscaron. ¡Qué lástima que siguieran siendo unos rebeldes! (Jeremías 7:26; 25:4). Un año después, Sedequías dejó de ser rey, Jerusalén fue destruida y se llevaron a la mayor parte de los sobrevivientes a Babilonia (Jeremías 39:1-7).
Hoy en día, las palabras de Jeremías 33:3 nos recuerdan que Dios puede darnos “conocimiento exacto de su voluntad” y revelarnos “cosas profundas” si estudiamos la Biblia y le pedimos su ayuda para entenderla (Colosenses 1:9; 1 Corintios 2:10). Entre estas cosas profundas está lo que Dios promete hacer dentro de poco (Apocalipsis 21:3, 4).
ue tiene importancia o relevancia por su valor, magnitud, influencia u otras características. 2. Que importa o merece la atención o interés de alguien.
Ant.: Insignificante, despreciable, pueril, trivial, Humilde, vulgar, desconocido.
★“Quién era el mayor”: O: “era”. Se define como el “deseo vehemente o apasionado de preferencia, honra, superioridad, poder o logro,” o “pasión por conseguir poder, dignidades, riquezas, fama, etc.” (g05 8/6 12; w77 100) Jesús les ejemplificó que por una actitud humilde es como un día llegarían a ser grandes, es el que es grande O: “ha de ser”, como reyes sobre la humanidad justa.
Lo Principal es lo primero
Cuenta la leyenda que una mujer pobre con un niño en los brazos, pasando delante de una caverna escuchó una voz misteriosa que allá adentro le decía: Entra y toma todo lo que desees, pero no te olvides de lo principal.
Recuerda algo: después que salgas, la puerta se cerrará para siempre.
La mujer entró en la caverna y encontró muchas riquezas.
Agotados los ocho minutos, la mujer cargada de oro y piedras preciosas, corrió hacia fuera de la caverna y la puerta se cerró…
Lo principal son los valores espirituales, nuestra relación con Dios, la familia, los amigos, vivir y disfrutar la vida. Así agotamos nuestro tiempo aquí, y dejamos a un lado lo esencial !Los tesoros del alma!
Jamás olvidemos que la vida en este mundo pasa rápido y que la muerte llega inesperadamente, que cuando la puerta de esta vida se cierra para nosotros, de nada valdrán las posesiones materiales, ni las lamentaciones.
No venda el coche para comprar gasolina, ni viva para trabajar, trabaje para vivir sin olvidar lo principal: |