Uno de los doce comisarios encargados de proveer alimentos, según un turno rotativo mensual, para la casa real de Salomón. (1Re 4:7, 14.) Actuaba desde Mahanaim, y el territorio que tenía asignado ocupaba la región meridional de Galaad.
El adjutor de Jehú que, “conforme a la palabra de Jehová”, arrojó el cuerpo del rey Jehoram de Israel al campo de Nabot. (2Re 9:25, 26.)
Hijo de Sisá; junto con su hermano Ahíya, fue secretario del rey Salomón. (1Re 4:1-3.)
1. Gareb, Uno de los hombres poderosos de David.
1. Gareb, Uno de los hombres poderosos de David. Itrita de la tribu de Judá. (2Sa 23:8, 38; 1Cr 2:4, 5, 18, 19, 50, 53; 11:26, 40.)
2. Gareb, Colina a la que se refiere Jeremías en una profecía de restauración. (Jer 31:39.) Seguramente señalaba los límites occidentales de la ciudad de Jerusalén tras su reconstrucción. No se conoce su ubicación exacta.
Uno de los doce comisarios de Salomón que tenían la responsabilidad de suministrar alimento para el rey y su casa durante un mes al año. Guéber era el hijo de Urí, y probablemente su hijo también fue uno de los comisarios. (1Re 4:7, 13, 19.)
1. Héfer, Hijo de Galaad y nieto de Manasés, antepasado de los heferitas. (Nú 26:29, 30, 32; 27:1.) Fue el padre de Zelofehad, a quien se le conoció por no haber tenido hijos, sino cinco hijas, cuya situación tras la muerte de su padre sentó jurisprudencia en todos aquellos casos de herencia en los que no había descendiente varón. (Nú 26:33; 27:1-11; Jos 17:2, 3.)
2. Héfer, Descendiente de Judá; fue hijo de Asjur y su esposa Naará. (1Cr 4:1, 5, 6.)
3. Héfer, Mekeratita que estuvo entre los guerreros más sobresalientes de David. (1Cr 11:26, 36.)
★Mekeratita - (Mequeratita) Apelativo de Héfer, uno de los guerreros de David, bien por ser descendiente de un hombre llamado Mekerá o por haber residido en un lugar que llevaba ese nombre. (1Cr 11:26, 36.) Algunos eruditos opinan que “mekeratita” puede ser una variante del término “maacatita”, que aparece en 2 Samuel 23:34.
4. Héfer, (Excavación [es decir, pozo]). Nombre que al parecer se dio tanto a una ciudad como a un distrito al O. del Jordán. Josué derrotó, entre otros, al rey de la ciudad cananea de Héfer. (Jos 12:7, 8, 17.) En el tiempo de Salomón, Socoh y el distrito de Héfer estaban bajo la jurisdicción de un comisario. (1Re 4:7, 10.) No puede asegurarse con certeza el emplazamiento de la antigua Héfer, pero algunos creen que podría tratarse de Tell el-Ifshar (Tel Hefer), a unos 40 Km. al NNE. de Tel Aviv-Yafo.
Carmelita que figuraba entre los hombres poderosos de las fuerzas militares de David. (2Sa 23:8, 35; 1Cr 11:26, 37.)
1. Igal, Principal de la tribu de Isacar enviado por Moisés para espiar la tierra de Canaán. (Nú 13:1-3, 7.)
2. Igal, Uno de los hombres poderosos de David; hijo de Natán de Zobá. (2Sa 23:8, 36.)
3. Igal, Hombre de la tribu de Judá que era de la línea real de David. (1Cr 3:1, 22.)
La expresión “los hijos de Jasén (Hasem)” el guizonita se utiliza en la relación de hombres poderosos de David. (2Sa 23:32.) En la lista paralela de 1 Crónicas 11:26, 34 se le llama Hasem el guizonita.
Netofatita (Jer 40:8) de la tribu de Judá (1Cr 2:50-54) cuyos hijos estuvieron entre los jefes de las fuerzas militares que no fueron llevados al exilio en Babilonia en 607 a. E.C. Los hijos de Efai y otros jefes de las fuerzas militares junto con sus hombres fueron a Guedalías en Mizpá, y este, a su vez, les juró que les iría bien. (Jer 40:7-9.) Al parecer, Ismael asesinó a los hijos de Efai cuando dio muerte a Guedalías. (Jer 41:3.)
Netofatita que figuraba entre los hombres poderosos de las fuerzas militares de David. (2Sa 23:8, 28; 1Cr 11:26, 30.) Maharai era descendiente de Zérah, y con el tiempo se le puso al cargo de la división de 24.000 que ministraba al rey David durante el décimo mes. (1Cr 27:1, 13.)
Beerotita (berotita) que se contaba entre los escuderos de Joab. Era uno de los hombres poderosos del ejército de David. (2Sa 23:24, 37; 1Cr 11:26, 39.)
Esclavos o ministros no israelitas del templo “(esclavos del templo).” Heb.: wehan·Nethi·ním; Gr.: Na·thi·ním; Vgc (lat.): Na·thi·naé·i. (1Cr 9:2; Esd 8:17.) Entre ellos se encontraban los descendientes de los gabaonitas de los días de Josué y otros “a quienes David y los príncipes dieron al servicio de los levitas” (Esdras 8:20).
También los que regresaron del exilio babilonio con Zorobabel en el año 537 a. E.C., había representantes de 35 familias de los netineos. (Esd 2:1, 2, 43-54, 58; Ne 7:46-56, 60; los hijos de Aqub, Hagab y Asná que menciona Esdras no figuran en Nehemías. Es posible que se combinaran con otros nombres de familia.) Asimismo, en el año 468 a. E.C., algunos netineos acompañaron a Esdras desde Babilonia a Jerusalén. (Esd 7:1-7.) Posteriormente, algunos netineos participaron en la reparación del muro de Jerusalén. (Ne 3:26.) También se unieron a los israelitas en un pacto para evitar las alianzas matrimoniales con extranjeros. (Ne 10:28-30.)
Muchos de los netineos probablemente eran descendientes de los gabaonitas, a los que Josué había constituido “recogedores de leña y sacadores de agua para la asamblea y para el altar de Jehová”. (Jos 9:23, 27.) Al parecer, otros netineos surgieron de los cautivos que tomaron el rey David y sus príncipes. (Esd 8:20; compárese con Sl 68:18.) Es posible que los netineos que pertenecían a la familia de Meunim fuesen descendientes de los cautivos que tomó el rey Uzías de Judá. (2Cr 26:7; Esd 2:50; Ne 7:52.) Otro grupo, los “hijos de Nefusim” (Nefusesim), quizás fueran descendientes de Ismael a través de Nafís. (Gé 25:13-15; Esd 2:50; Ne 7:52.)
En tiempos postexílicos, los netineos residieron en Ofel, al parecer cerca del recinto del templo, así como en otras ciudades. (Esd 2:70; Ne 3:26, 31; 7:73; 11:3, 21.) Debido a su trabajo en el templo, el rey persa Artajerjes los eximió de pagar impuestos, tributos y peaje. (Esd 7:24.)
Arbita que fue uno de los hombres poderosos de las fuerzas militares de David. (2Sa 23:8, 35.) Puede ser la misma persona que el Naarai (posiblemente, forma abreviada de Nearías, que significa: “Muchacho [Mozo] de Jah”), Hijo de Ezbai y hombre poderoso de las fuerzas militares de David, que se menciona en 1 Crónicas 11:26, 37, que al parecer es una lista paralela.
Deidad astral que Esteban mencionó en su defensa ante el Sanedrín. (Hch 7:43.) Probablemente citó las palabras de Amós 5:26, 27 de la Septuaginta para mostrar que el exilio de Israel fue el resultado de adorar a deidades extranjeras, entre ellas Refán (Keván). Los traductores de la Septuaginta tradujeron “Keván” por Rhai-fán, pero en la cita de Esteban aparece la designación Rhom-fá en el texto griego de Westcott y Hort. En una nota sobre Hechos 7:43, F. J. A. Hort observa: “La LXX emplea en Am V 26 la forma [Rhai-fán] o [Rhe-fán], que es similar a Repa o Refa, uno de los nombres del Saturno egipcio (Geb)”. (The New Testament in the Original Greek, de Westcott y Hort, Graz, 1974, vol. 2, apéndice, pág. 92; véanse ASTRÓLOGOS [Mólek y la astrología en Israel]; Keván.)
1. Rehúm - (Nehúm), Nombre que aparece al comienzo del registro de exiliados.
1. Rehúm - (Nehúm) Nombre que aparece al comienzo del registro de exiliados en Babilonia que volvieron a Jerusalén con Zorobabel y Jesúa. (Esd 2:1, 2.) En Nehemías 7:7 su nombre adopta la grafía Nehúm.
2. Rehúm, Sacerdote que regresó con Zorobabel. (Ne 12:1, 3.) Una simple transposición de caracteres hebreos le convertiría en el Harim que se menciona en Nehemías 12:15 y en otros lugares.
3. Rehúm, “Funcionario principal del gobierno” (del Imperio persa) que probablemente residía en Samaria y que tomó la iniciativa en escribir una carta al rey Artajerjes en la que acusaba falsamente a los judíos en cuanto a sus intenciones de reedificar Jerusalén. La respuesta imperial ordenó que Rehúm y sus compatriotas fueran a Jerusalén a paralizar por la fuerza los trabajos de reconstrucción. (Esd 4:8-24.) Sin embargo, Ageo y Zacarías no tardaron en animar al pueblo a reanudar las obras, que finalmente contaron con la aprobación del gobierno persa una vez se repasó el decreto original de Ciro. (Esd 5:1-6:13.)
4. Rehúm, Levita hijo de Baní que ayudó a restaurar el muro de Jerusalén. (Ne 3:17.)
5. Rehúm, Cabeza de una familia postexílica (o un representante de este) que autenticó el pacto de fidelidad celebrado durante el mandato de Nehemías. (Ne 10:1, 14, 25.)
1. Safat, Principal que representó a la tribu de Simeón como uno de los doce espías que por cuarenta días inspeccionaron la Tierra Prometida; era hijo de Horí. (Nú 13:2, 5, 25; véase ESPÍAS.)
2. Safat, Uno de los hombres que David tenía a cargo de sus vacadas; hijo de Adlai. El ganado que estaba a su cuidado se hallaba en las llanuras bajas. (1Cr 27:29.)
3. Safat, Padre del profeta Eliseo. (1Re 19:16, 19; 2Re 3:11; 6:31.)
4. Safat, Descendiente de Gad que vivió en Basán. (1Cr 5:11, 12.)
5. Safat, Descendiente postexílico del rey David. (1Cr 3:22.)
Hararita, padre de Ahiam, guerrero de David. (2Sa 23:33.) Se le llama Sacar en 1 Crónicas 11:35.
Escriba de la administración de Rehúm, el principal funcionario del gobierno de la provincia persa que quedaba “más allá del Río”, de la que formaba parte Jerusalén. Fue uno de los que escribieron una carta al rey Artajerjes para impedir que los judíos continuaran su obra de reconstrucción en Jerusalén. Artajerjes emitió una orden para detener la obra, pero esta se reanudó durante el reinado de su sucesor, el rey Darío Histaspes (Darío I de Persia). (Esd 4:8-24.)
Padre netofatita de Seraya, un caudillo militar de los judíos que quedaron en Jerusalén tras la deportación a Babilonia. (2Re 25:23; Jer 40:8.)
Guerrero ammonita que se unió a “los hombres poderosos de las fuerzas militares” de David. (1Cr 11:26, 39; 2Sa 23:37.)
1. Zerahítas, Descendientes de Zérah, hijo de Simeón. (Nú 26:12, 13.)
2. Zerahítas, Familia tribal descendiente de Zérah, hijo de Judá. (Nú 26:20; Jos 7:17; 1Cr 27:11, 13.)
Ezrahíta. Sobrenombre aplicado a Etán (1Re 4:31; Sl 89, encab.) y a Hemán (Sl 88, encab.), hombres de reconocida sabiduría. En 1 Crónicas 2:3-6 se dice que Etán y Hemán eran descendientes de Judá a través de Zérah, de modo que el sobrenombre “ezrahíta” parece ser sinónimo de “zerahíta”. (Nú 26:20.) El Targum de Jonatán define “ezrahíta” como “hijo de Zérah”.
Dios supremo de los griegos politeístas que corresponde al Júpiter de los romanos. Era dios de los cielos, y se consideraba que tenía control sobre los vientos, las nubes, la lluvia y el trueno, ejerciendo su poder sobre estas fuerzas naturales tanto con un propósito destructivo como benéfico. El poeta Homero (Ilíada, VIII, 1-25) representa a Zeus como un dios con más fuerza que todos los demás dioses juntos. Sin embargo, no se le consideraba supremo en un sentido absoluto, pues a veces se le presenta como una víctima de engaño que tiene que ceder a la voluntad de las Parcas y el Destino.
Aunque las leyendas relatan los incidentes de su nacimiento, niñez y ascenso al trono, se ocupan principalmente de las muchas aventuras amorosas de Zeus. Los relatos mitológicos explican que seducía tanto a diosas como a mujeres terrestres y que engendró un sinnúmero de hijos ilegítimos. Paradójicamente, se dice que mató a Iasión (un mortal) por haber cometido inmoralidad con la diosa Deméter. Su matrimonio con Hera no solo se vio afectado por sus muchos actos de infidelidad, sino también por otros problemas. Se dice que su esposa lo regañaba tanto que en una ocasión se quejó amargamente de ello ante las deidades reunidas.
En ciertas ocasiones, la adoración pura de Jehová llegó a estar en conflicto directo con la adoración del dios falso Zeus. El rey Antíoco IV Epífanes, intentando erradicar la religión judía, mandó que se profanara el templo de Jerusalén y se dedicara de nuevo al Zeus del Olimpo. Véase el libro apócrifo de 2 Macabeos 6:1, 2.
En el siglo I E.C., cuando los habitantes de Listra vieron a Pablo sanar a un cojo, creyeron que este y Bernabé eran dioses, e identificaron a Pablo con Hermes y a Bernabé, con Zeus. El sacerdote de Zeus hasta sacó toros y guirnaldas con el fin de ofrecer sacrificios junto con la muchedumbre. (Hch 14:8-13.) Dos inscripciones antiguas descubiertas en el año 1909 en las inmediaciones de Listra dan testimonio de la adoración de estos dos dioses en aquella ciudad. Una de las inscripciones hace referencia a los “sacerdotes de Zeus” y la otra menciona al “Grandísimo Hermes” y “Zeus el dios-sol”. (The International Standard Bible Encyclopaedia, edición de J. Orr, 1960, vol. 3, pág. 1944.)
El barco en el que Pablo zarpó como prisionero de la isla de Malta llevaba el mascarón de proa “Hijos de Zeus”, es decir, “Dióscuros”, los hermanos gemelos Cástor y Pólux. (Hch 28:11.)
Hijos de Zeus Gr.: “Dióscuros”, los hermanos gemelos Cástor y Pólux. El libro bíblico de Hechos cuenta que el apóstol Pablo, durante su viaje a Roma, navegó de Malta a Puteoli en un barco que llevaba en lo alto de la proa dos esculturas de los “Hijos de Zeus” (Hch 28:11). En aquella época, el uso de estas figuras, llamadas mascarones, estaba muy extendido.
Según la mitología grecorromana, Zeus (Júpiter) y Leda, reina de Esparta tuvieron dos hijos gemelos, Cástor y Pólux. A estos Dióscuros o “Hijos de Zeus” se los consideraba, entre otras cosas, expertos marinos capaces de controlar el viento y el mar. Con el tiempo, se los empezó a venerar como dioses patronos protectores de los marineros. Los navegantes les presentaban sacrificios e invocaban su protección cuando se producían tormentas. Además, creían que estos dioses gemelos demostraban su poder manifestándose en lo que se conoce como el fuego de Santelmo, una ráfaga luminosa que a veces aparece sobre los mástiles de las embarcaciones durante tormentas fuertes.
Se creía que estas deidades se manifestaban durante las tormentas asumiendo la forma del fuego de San Telmo. El barco alejandrino en el que Pablo navegó como prisionero desde Malta hasta Puteoli mientras iba a Roma, llevaba el mascarón de proa “Hijos de Zeus”. Es probable que la imagen o símbolo de Cástor y su nombre estuviesen a un lado de la proa, y al otro, los de Pólux. (Hch 28:11.) Este detalle sobre el mascarón de proa del barco es una prueba más de que el relato lo escribió un testigo ocular de los hechos.
El culto a Cástor y Pólux se extendió por todo el mundo grecorromano, y cierta fuente antigua menciona específicamente su existencia en la región cercana a Cirene, en el norte de África. El barco del que habla el relato de Hechos procedía de Alejandría (Egipto), una ciudad cercana a Cirene.